POR MANUEL GÓMEZ C.
FOTOS: ÓSCAR RAMÍREZ

RICARDO Peláez es un hombre exitoso.
Como jugador, el ahora Presidente Deportivo, tiene mucho palmarés, y como gente de pantalón largo en el América, poco a poco suma títulos. Sin duda, Peláez ha sabido integrar una familia futbolística, con valores deportivos que se reflejan en la cancha.
ESTO platicó en exclusiva con el directivo, precisamente ahí, en el nido.
“Me siento muy contento, porque veo una extraordinaria disposición de los jugadores, y como ejemplo, te menciono este hecho en dos jugadores: Paúl Aguilar llegó de la Selección lastimado e inmediatamente inició su rehabilitación, como también está el caso de Miguel Samudio, quien jugó para la Selección de Paraguay, y se reportó inmediatamente para entrenar con el equipo”, dijo.
Peláez destaca la aplicación de sus jugadores.
“Observo al equipo muy concentrado, muy metido, muy dispuesto a lograr los objetivos. Con una gran comunicación con el cuerpo técnico, buen ambiente de trabajo, alegría, sonrisas, eso me tiene muy motivado”, sostuvo.
La filosofía de Peláez es que “haya armonía en el grupo. Buscar que los jugadores estén contentos, que se sienta que es importante para que como tales respondan en la cancha, y que de ellos dependemos cuerpo técnico y directiva. Ellos nos arrastran al éxito, cuando hay disposición, buen ambiente y compromiso”.
Para Ricardo Peláez “me ocupa y preocupa que el jugador se sienta con participación en la toma de decisiones, y no hay mejor asesor en el futbol para un directivo y entrenador que el jugador, porque es quien ejecuta”.
Al principio de esta nueva era Ambriz se sufrió, pero actualmente “no somos los mejores ni fuimos los peores. Somos un equipo que tiene un rumbo, con un objetivo, que trabaja con alegría, y vamos con un rumbo definido, y repito, el ambiente que priva entre los jugadores es lo que más me tiene contento”.