España.- Rafael Benítez, entrenador del Real Madrid, afrontará el reto de superar al Espanyol con las bajas del brasileño Danilo y del colombiano James Rodríguez y con las estadísticas de su lado en el estadio del cuadro catalán, donde el equipo blanco solo ha perdido dos encuentros en las últimas diez temporadas.
Cornellà-El Prat se presenta como una oportunidad para el Real Madrid, que desea sumar su segunda victoria consecutiva en Liga después de golear 5-0 al Betis hace dos semanas. Después de una crisis anotadora de pretemporada que se extendió a la primera jornada (0-0 en El Molinón ante el Sporting), los hombres de Benítez recuperaron el olfato para lograr su primera victoria.
Sin embargo, el parón liguero provocado por los encuentros internacionales no ha traído buenas noticias a Benítez, que ha perdido a dos piezas que fueron titulares en los primeros compases del torneo. Las lesiones se han cebado con Danilo y con James Rodríguez, que estarán un mes alejados de los terrenos de juego.
El primero sufrió una rotura en la fascia plantar de su pie derecho durante un amistoso con Costa Rica y el segundo una rotura muscular en su muslo izquierdo ante Perú. Sus sustitutos serán Dani Carvajal e Isco Alarcón, ambos suplentes contra el Sporting y el Betis.
La cercanía del estreno en la Liga de Campeones (el próximo martes ante el Shakhtar Donetsk) y la carga de viajes y minutos de muchos internacionales, podría provocar más cambios en el once inicial del Real Madrid, que con las de Danilo e Isco, ha sufrido seis lesiones desde que comenzó la pretemporada el 12 de julio.
Asier Illarramendi (ahora en la Real Sociedad), Karim Benzema, Cristiano y Pepe (los tres recuperados), fueron los primeros en caer antes de Danilo y James. Por eso, para evitar más bajas inesperadas tras los partidos internacionales, nombres como los de Casemiro podrían aparecer en la alineación para sustituir a Toni Kroos.
Benítez es partidario de hacer rotaciones y las primeras podrían llegar en Cornellà, un campo afín a los intereses madridistas. En la última década, solo en el curso 2007/08 (2-1 con Bernd Schuster en el banquillo) y en el 2005/06 (1-0 con Wanderley Luxemburgo), el Real Madrid cedió los tres puntos en el estadio del Espanyol.
A esos datos quiere subirse Cristiano Ronaldo, que desea romper su sequía goleadora. Lo intentará en un campo en el que ha marcado cuatro goles, tres de ellos la temporada pasada, en la que logró un triplete en la victoria por 0-4 de los blancos. Probablemente jugará junto a Benzema y Bale, ambos en un buen momento tras sus goles la pasada jornada.
Por su parte, el Espanyol espera romper la buena racha de resultados del Real Madrid en su estadio y, ocho cursos después de esa victoria ya citada en la campaña 2007-08, quiere ganar y dar una buena imagen en un partido que puede servir para reivindicarse y ganar crédito tras ganar al Getafe y perder ante el Villarreal.
El Madrid siempre es un rival goloso para los aficionados. El estadio presentará una de las mayores entradas de la temporada. Todos los futbolistas han confesado durante la semana que se trata de un encuentro especial, en el que intentarán mostrar su mejor versión y dar una alegría a los seguidores.
El entrenador Sergio González no podrá contar con los centrocampistas Burgui y Marco Asensio, ambos cedidos por el Real Madrid esta temporada.
Si juegan, el Espanyol debería pagar una indemnización, algo que no se plantea. Tampoco estará el central chileno Enzo Roo, con permiso para viajar a su país por asuntos personales.
González hará cambios en el once y de funcionamiento táctico para intentar sorprender mañana al conjunto de Rafa Benítez. De todos modos, la lista de convocados para la jornada se conocerá después del entrenamiento de esta tarde, a las 18.30 horas en el estadio de Cornellà-El Prat, a puerta cerrada.
La versión del Espanyol estará, en principio, más mejorada que en los dos primeros compromisos. El cuerpo técnico ha trabajado en el parón distintos aspectos futbolísticos, como la salida de balón, además de insistir en la forma física. Los jugadores acusaron el desgaste al principio de competición y deseaban corregirlo.
Por otra parte, el club homenajeará momentos antes del partido al exdelantero Raúl Tamudo, que el pasado sábado anunció su retirada del fútbol profesional. La entidad catalana le entregará la insignia de oro y brillantes, la máxima distinción que otorga el Espanyol. EFE.