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21, septiembre 2015 - 18:32

┃ ESTO

SINCRO

POR HÉCTOR REYES

LA entrenadora Adriana Loftus cumplió 30 años, con algunos intervalos ausente, al frente de la selección de nado sincronizado en una de las mejores temporadas con el equipo y dueto de su carrera, por lo que es una de las firmes aspirantes a ganar el Premio Nacional de Deportes 2015, lo que sería un reconocimiento de género y trayectoria.

Nunca se le ha entregado a una entrenadora.

“Creo que ha sido, sin lugar a dudas, la mejor temporada para el nado sincronizado y a lo mejor suena un poco soberbio, es el mejor año de todos los tiempos de la disciplina”, consideró quien tuvo como principal maestra a Guillermina Oteiza, la primera juez internacional de México.

El equipo obtuvo un tercer lugar en la Copa Mundial en Canadá; ganó siete medallas de oro durante los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Veracruz, dos medallas de plata en los Juegos Panamericanos de Toronto -se había obtenidos en dos versiones pasadas hace 19 y 40 años-,  y ubicarse por primera vez en las cinco finales del Campeonato Mundial de Natación celebrado en Rusia.

Ahora vendrá el preolímpico a principios de marzo, dónde se disputarán los últimos tres boletos en  la modalidad de equipo, ya están calificados cinco de cada continente, en América lo tiene Brasil por ser sede, y adelante tienen a Japón, Ucrania, España e Italia, países a vencer y redondear el milagro de regresar a los olímpicos después de 19 años.

Por su parte, el dueto de Nuria Diosdado, máxima ganadora de medallas de oro en Veracruz 2014 y Karen Achach, se consolidó al ubicarse dentro de las primeras diez del orbe. En los Juegos Olímpicos de Londres 2012, el dueto había obtenido el lugar 18 y ahora con una nueva integrante los resultados fueron más que satisfactorios, ya que dar un salto de esta naturaleza es muy difícil, hacer muchos méritos y mostrar una excelente rutina.

A parte de dedicarle ocho horas al día a la selección nacional, en la Alberca Olímpica Francisco Márquez dedica tiempo a la formación de nuevas entrenadoras. Ella trabajó en Chile y también en alguna época la invitaron a formar la escuela de nado sincronizado en Brasil.

“No se le ha dado la difusión que merecemos, no se le ha dado el justo valor, no sé si porque sea un deporte de puras mujeres o qué, pero el ser candidatas y el estar propuestas sería todo un honor, todo un orgullo. De manera personal, el que se me proponga como entrenadora no puedo ni pensarlo, sería algo, no te puedo decir meritorio, pero es un reconocimiento a la labor que he hecho durante muchos años”.

Adriana Loftus comenzó su carrera en el nado sincronizado a los 12 años, por lo cual afirmó que ha tenido más tiempo en la disciplina acuática  que en cualquier otra actividad,  se le conoce en el mundo de este deporte por su inventiva y sello artístico.

“He vivido para el nado sincronizado y es algo que me apasiona. Cuando haces algo que te apasiona el resultado se da a la larga. El nado sincronizado tiene cierto prestigio, en el último año ya nos ven con otros ojos, nuestras calificaciones subieron y el reconocimiento internacional de jueces y otras entrenadoras es algo halagador”, concluyó.