POR ABIGAIL PARRA
FOTOS: Juan Ramos

CON un grupo de 21 jugadores y con un equipo técnico que desde comienzos de año dio más forma a la preparación y exigencia futbolística, Mario Arteaga llegará a Chile para emprender la aventura mundialista. Decidir quiénes conformarían la Selección Nacional Mexicana Sub-17 no fue nada fácil, y menos ante un equipo de 26 elementos que desde hace un par de meses se consolidaron más.
Una vez conocida la convocatoria, el estratega azteca habló en entrevista con ESTO sobre los pormenores de elegir a los mejores, así como ver el tema de lo táctico ante la ausencia de un jugador que por mucho pintaba para ser de los favoritos, Martín Rodríguez del Querétaro: “Fue una sorpresa que no se esperaba, pero recae en lo táctico respecto a lo que él podría darme al jugar en dos posiciones y cubrir con otro elemento una de esas líneas. Hablamos con los cinco jugadores y se les dijo la razón de la decisión. Creo que esa es la manera más adecuada y lo tomaron muy, muy bien, fueron positivos y maduros. Eso lo supieron los demás, es muy importante por la unión que trae el equipo desde atrás”, señaló.
Se podría decir que para Mario todo fue fácil, no hubo impedimento alguno por parte de los clubes mexicanos ni por el de la MLS LA Galaxy: “No tuve ningún problema. Siempre he tenido el apoyo de los equipos, acá es un gana-gana porque sus jugadores en Selección tienen un roce internacional y así van adquiriendo más capacidad y eso les beneficia en lo personal y a la misma Selección”.
Si bien en los últimos años la categoría Sub-17 a nivel de Selección ha marcado una historia con dos campeonatos mundiales, Perú 2005 y México 2011, el técnico tricolor no considera que su escuadra sea favorita debido a lo realizado por generaciones pasadas, sino porque su preparación, que contempló una competencia interna y grupal con equipos de categorías mayores, así como fogueo en torneos internacionales, hacen que el plantel mexicano tenga fuertes argumentos: “Nos vamos sobre las exigencias de los entrenamientos, los partidos y los torneos en los que participamos. Llega nuestra competencia y sabemos que somos un rival a vencer, por eso nos preparamos, estamos conscientes de la exigencia y compromiso que hay para estar en los primeros lugares, después llegar a la final y ganarla. De nada nos sirve tener rivales a modo, no salir a torneos, estar cómodos aquí en casa; al final necesitarás mucho más que eso y estamos preparados para ello (el Mundial)”.
México jugará mañana ante Estados Unidos en las instalaciones del Centro de Alto Rendimiento, y el viernes también, ambos como duelos de preparación; el domingo emprenderán el viaje a Chile, en donde tendrán cuatro enfrentamientos más, todos con selecciones que participarán en el Mundial: Chile, Paraguay, Nueva Zelanda y Croacia; los dos primeros con miras al rival con el que el tricolor debutará en la competencia: Argentina; Nueva Zelanda para ver su idea futbolística, así como características físicas de Australia, con el que se medirán el 27 de octubre, y los croatas por Alemania, equipo con el que se cerrará la fase de grupos en Talca el 24 de octubre.

OCTUBRE PERFECTO
Tras un verano no tan prolífero en el campo de Selecciones Nacionales, llega el otoño con tres objetivos por cumplir: la mayor con la Copa Confederaciones ante Estados Unidos el 10 de octubre, la Sub-22 en el Preolímpico de Concacaf por el pase a Río de Janeiro 2016, y el Mundial Sub-17. Panorama ideal para cerrar el año tricolor, según Arteaga: “Es el mes perfecto para cerrar el año de la mejor manera en Selecciones, no ver de lejos el Olímpico (conseguir el boleto a Olímpicos del 2016), no ver lejos la Confederaciones y tampoco que se quede campeón mundial en Sub-17, sabemos el camino y si hacemos las cosas bien se podrá hacer el objetivo en todas las Selecciones”.