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Mira

23, septiembre 2015 - 12:00

┃ Manuel Gómez

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RUBENS Sambueza está de vuelta.
El capitán del América cumplió un partido de suspensión y ahora se reporta listo para reaparecer este sábado, contra las Chivas.
La sabiduría que muestre Sambu será determinante ante el cuadro que ahora dirige Matías Almeyda.
ESTO platicó ayer en exclusiva con Sambu, quien está consciente de lo que representa el Clásico Nacional.
“Todos sabemos que el Clásico Nacional es un partido interesante, en el cual se juegan muchas cosas, entre ellas el prestigio, por eso hay que ganarlo, por orgullo y dignidad, porque todo mundo quiere ser vencedor de ese Clásico”, dijo.
Respeta a los demás rivales, pero el Clásico Nacional se cocina aparte.
“El Clásico es el Clásico y hay que jugarlo con mucha seriedad, porque esta clase de Clásicos marcan muchas cosas, marcan la pauta del estado anímico. Hay que salir a la cancha a dejar el alma, a dejar hasta la última gota de sudor, y como te dije, hay que ganar por orgullo y dignidad”.
Sambueza también señala que “ganar un Clásico es el despertar del rival, es revertir muchas cosas. Ahora, tanto América como Chivas viven diferentes situaciones, pero eso no cuenta. El hecho de que Chivas esté situado en equis lugar de la tabla y el América en zeta lugar, a final de cuentas las estadísticas no cuentan. Aquí, lo único que cuenta es el amor propio de cada quien”.
Hay otro Clásico, el Clásico Joven, contra Cruz Azul, “que ganamos 2-0, y a pesar de que también es un Clásico, el sabor de este es diferente, y conste que lo digo con respeto y espero que no se malinterprete”.
Rubens también aclara.
“Un Clásico se gana como sea, y el Nacional, con mayor razón. Claro, uno busca dar espectáculo, pero a veces las circunstancias del mismo partido no te lo permiten, y lo mismo sucede en el partido contra Pumas, son clásicos, pero este Nacional representa algo más, porque se enfrentan los dos equipos más populares del futbol mexicano y me parece que es el más grande del país, y repito, lo digo sin desmerecer a los demás equipos”.
No tiene amigos en Chivas.
“Tengo compañeros de profesión, a quienes como seres humanos saludo, pero deportivamente salgo a la cancha para ganarles. No tengo amigos en Chivas, salvo a Israel Castro cuando estuve en Pumas, pero más que amigos o compañeros, somos enemigos en el buen sentido de la palabra”.
El rebaño tiene nuevo pastor, Matías Almeyda, al respecto, Sambueza dice: “Siempre que en un equipo debuta un técnico cambian muchas cosas. Matías lo hizo muy bien contra Querétaro y ahora será un partido complicado para los dos. Ojalá que sea un partido abierto y que el público, sobre todo del América, salga contento del estadio Azteca”.
De su castigo, Sambueza declaró: “Aprende uno de errores y regreso con muchas ganas, sobre todo en el Clásico. El árbitro que haga su trabajo y yo hablaré con mis compañeros”.