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POR MIGUEL ÁNGEL MÚJICA
ENVIADOS ESPECIALES

PUEBLA.- ¿Qué espera el Porto?
¿A caso que Raúl Jiménez haga 10 o 20 goles en un partido? o ¿Qué haga monumentales chilenas en cada juego?

Es inexplicable, luego de las actuaciones que mostró, sobre todo la de esta tarde ante Puebla. La realidad es que el futbol mexicano le está quedando chico al delantero del América, quien decide encuentros con sus goles.

El atacante volvió a hacerse presente en el marcador, no una, ni dos, sino tres veces para darle a las Águilas el liderato de la competencia; y junto al estreno de Oribe Peralta, sentenciar el 0-4 final en el campo camotero.

Ni la leyenda viviente, Cuauhtémoc Blanco, ni el planteamiento ofensivo de Rubén Omar Romano fueron suficientes para frenar a Raúl, que como locomotora acelera rumbo a Europa, no le faltará pareja de baile, solo espera al que se anime a sacarlo a bailar, ya que si los portugueses no quieren, no le faltarán pretendientes.

EL JUEGO
Un Cuauhtémoc diferente al de la mayoría de los encuentros, lleno y con ánimo fue el que se observó, y es que el visitante era, el siempre repudiado en tierras camoteras, América. Curiosamente fueron los visitantes lo que movieron, Oribe y Raúl tocaron para el inicio del choque.

De inmediato la visita demostró el por qué de su gran momento en la actualidad, con diferentes dorsales al cuadro que saltó ante Tijuana en el Azteca; el Ave mostró su calidad, además el parado fue el que funcionó ante Xolos, un 4-4-2 que sirvió para darle más verticalidad al ataque crema.

Moy en el arco, Paúl, Aguilar, Goltz y el capitán Layún en la zaga; un escudo en Molina, Velasco como medio centro; en las bandas Osvaldito y Arroyo, arriba Jiménez junto a Peralta, así paró el 11 de ave, que no contó con Sambueza, quien no se recuperó de su molestia.

Enfrente, La Franja tuvo jugadores en zonas claves de la cancha con las que intentarían competirle al cuadro de Mohamed. Romero, Noriega y Cosme como referentes, pocas individualidades, pero apelaron a su conjunto para poner la cara.

No sería suficiente, ya que Arroyo hizo lo que quiso por la banda izquierda, tal fue la libertad del ecuatoriano, que apenas pasado el cuarto de hora, un centro de “Gambetita” que concretó a Jiménez, puso a volar a las Águilas.

Los camorreros reaccionaron de inmediato, Cosme tuvo dos, ambas muy claras incluso sin Muñoz en el marco, pero increíblemente mandó sus remates a la tribuna.

La última del primer lapso la tuvo el “Cepillo” luego de una impresionante habilitación de Velasco de “taco”, pero sin cerdas, Oribe no pudo cepillar la cabaña de Cota en ese momento. Sin mucho más que ofrecer, Pérez Durán mandó todo al descanso.

Consciente de que tenía que arriesgar por estar abajo en el marcador, Romano mandó de inmediato un cambio ofensivo, el amonestado Álvarez se quedó en las duchas para darle ingreso a Loroña, La Franja mejoró en demasía, mas no lo reflejó en el marcador.

Mohamed, tal vez como un anzuelo, realizó su primera modificación, la entrada del “Topo” Valenzuela por Velasco dejó anonadado a Romano, quien sin pensarlo mandó llamar al hombre del morbo, Cuauhtémoc Blanco, pero antes de la entrada del “10”, en la cancha, Jiménez disparó, el esférico pegó en el poste y en su afán de desviar, Romero tundió a Peralta en el área. ¡Penalti para el América!

NI CON BLANCO
Antes de que se cobrara la pena máxima, Blanco entró al campo, solo para observar como Jiménez cobraba de maravilla el castigo para el 2-0.

Ni con el Cuau fue suficiente para frenar al América, incluso a los camoteros les llenaron la canasta de goles, primero el de Oribe Peralta, quien se estrenó como goleador amarillo y después la consolidación de quien pudo jugar su último encuentro como Águila, Raúl Jiménez, que apunta a Europa.

América es líder, gana, gusta y ¡hasta golea!
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