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7, octubre 2015 - 23:38

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rose bowl

PASADENA.- El Rose Bowl última detalles para la gran cita. El estadio de la rosa está listo para la gran cita entre mexicanos y estadounidenses, que se batirán por el pase a la Copa Confederaciones.

El gran “rosal” de Pasadena se encuentra en las últimas tareas para recibir un gran duelo, por lo que labores de mantenimiento, seguridad y limpieza son el día a día de los trabajadores del inmueble con vistas al choque del próximo sábado.

El inmueble estará a reventar, pues desde la semana pasada se informó que las casi 92 mil localidades fueron vendidas, por lo que ni un alfiler cabrá y menos cuando la Concacaf busca que la sede sea imparcial, más allá de que todo el estado de California apoye al Tricolor debido a todos los paisanos.

El calor y humedad jugarán a favor de los mexicanos que están acostumbrados a esas temperaturas, mientras que el estadounidense se verá un tanto afectado, aunado a que en las tribunas la mayoría será de mexicanos.

Pese a no ser un estadio moderno y vanguardista, pues fue inaugurado allá por 1936, el Rose Bowl espera estar a la altura de una gran final, como aquella que se dio en el 2011, cuando el Tricolor levantó el título de la mano del Chepo de la Torre con grandes actuaciones, como las de Giovani dos Santos, quien desparramó a medio mundo con uno de los grandes goles de la Copa Oro.

El estadio de Pasadena es un gigante dormido, pues en él no milita club de la MLS o de la NFL y su única recompensa son los juegos colegiales de futbol americano, pero espera explotar como en lo viejos tiempos, como lo hizo en el Mundial de 1994, cuando albergó octavos, semifinales y la gran final entre Brasil e Italia.

Por ahora todo es tranquilidad en los alrededores de Pasadena, pero para el día del encuentro la ciudad se colapsará, las calles serán una locura, pues desde hace tiempo se calienta el Clásico de la Concacaf con publicidad en cada uno de los postes o espectaculares, y por si fuera poco, está latente la gran rivalidad entre yanquis y mexicanos. (Luis García Olivo/Fotos: Jorge Barrera/Enviados especiales).