PASADENA, Calif.- Le pegó, lo intentó pero nunca pensó en meter ese golazo, Paúl Aguilar se sinceró al salir del Rose Bowl, el lateral habló de la anotación que le dio a México su pase a la Copa Confederaciones del 2017: “En primera instancia veo el balón que sale demasiado elevado, en un principio cuando arranco intento parar la pelota, iba pensando en eso, pero la verdad vi a un rival muy cerca, decidí cambiar de opinión”, explicó Aguilar.
Sin otra opción Paúl le metió todo el empeine al globo que envió Jiménez: “Opté por pegarle pero la verdad no pensé que fuera a anotar”, aceptó el zaguero.
El ex de Pachuca no se comió el pastel solito, Aguilar lo repartió en rebanadas: “Gracias a Dios me tocó la oportunidad de anotar el gol, pero lo más importante es el trabajo del grupo, todos estuvieron insistiendo, el grupo buscó la posesión de la pelota”, destacó.
Doblegar a los norteamericanos no fue fácil, los gringos dieron pelea: “Nosotros tuvimos llegada, desgraciadamente Estados Unidos es un rival muy complicado, ellos hicieron su partido, nos alcanzaron dos veces”, dijo Paúl.
El tanto histórico que logró tuvo una dedicatoria especial: “El gol está dedicado para mi esposa, para mis hijos, para mi familia, que sepan que son parte de esto”, resaltó el incansable zaguero.
El afecto para sus seres queridos quedó evidenciado: “Lo mejor que me pudo haber pasado fue conocer a esa mujer tan hermosa, tener esos hijos tan bellos, el gol está dedicado para ellos especialmente”, cerró. (Luis García Olivo/Foto: Jorge Barrera/Enviados especiales).