LA dureza de su rostro y los enérgicos gritos son máscara del ‘Jefe’.

Minutos antes de iniciar una práctica más de La Máquina, Tomás Boy aceptó que a su llegada encontró un plantel desorientado por los malos resultados, pero con la ilusión de revertir el mal paso; asimismo, aseguró que no ha puesto de mano dura, únicamente ha trabajado para regresarle la confianza a los cementeros.

“Encontré un grupo que no entendía lo que pasaba, desorientado por los resultados pero dispuesto a resolver esta situación. No la tengo tan dura (la mano), me dieron una paliza y no me sirvió. La misión del entrenador es generar confianza, es una de las tareas en el plano individual y colectivo, si pierden la confianza dejan de intentar, así que hay que hacer que vuelvan a intentarlo”, dijo Boy Espinosa, quien a  unas cuantas horas de hacer su debut como técnico de un equipo grande, aceptó que se encuentra ansioso por ver en acción a su Máquina, la cual presentará cambios en la formación, aunque dejó en claro que para marcar su estilo tardará cerca de tres temporadas: “Estoy muy animado y trabajando, me siento bien, hemos tenido semana y media movida en la parte de las prácticas. Sólo pienso en el trabajo, estoy animado, ya quiero ver al equipo en la cancha. Para implementar algo importante se necesita año y medio o dos. Me pongo en manos de los jugadores, por el momento hay que apelar a su experiencia y calidad, busco que estas tres partes se integren en la organización y algunos movimientos importantes en la formación”.

Asimismo, el ‘Jefe’ negó sentirse presionado al dirigir a un ‘grande’ y mencionó que dará su máximo esfuerzo: “No (hay presión), sólo es más mediático, pero la presión es la misma. Le prometo darle lo que sé y el mejor de mi trabajo para que las cosas salgan bien”.

A pesar de que el boleto a la Liguilla está al alcance de La Máquina, Boy Espinosa no piensa en la calificación: “Es muy pronto para pensar eso, me voy partido a partido. En la suma de los partidos vamos viendo lo matemático, pero no voy a llevar a los jugadores a esos términos porque los presiono, y mi labor está sólo en mejorar la inercia que no es buena”, concluyó.