COMO fortuito calificó Tomás Boy el empate ante Dorados. El “Jefe” culpó a la falta de armonía en la cancha como culpable de la paridad, además del bajón de juego en el segundo lapso.
“El resultado no es lo esperado, no puedo decir que es justo o no, lo que sí es que el equipo no hizo bien el segundo tiempo, no fuimos armónicos, el rival tomó control en una jugada fortuita, pero en el primero creo que hicimos bien las cosas”.
Recalcó que las fallas en la parte complementaria fue lo peor de su equipo, aunque rescató que el empate rompió con la racha negativa que venía arrastrando La Máquina. “No podemos permitir tantos errores, no perder es importante, para cortar esa inercia negativa. Estuvimos ansiosos por dar un buen rendimiento, hemos carecido de muchas cosas”.
Aceptó que el tema Liguilla se ve lejano, pero recalcó que no le quita el sueño, porque lo que ahora le ocupa es el funcionamiento y el planteamiento en la cancha.
“Complica el tema de calificar, pero hay que estar tranquilos. Prácticamente es un quién sabe, a mí lo que me interesa es el esquema, es tener integración, no tengo pretexto, tenemos que da resultados”, dijo y recalcó que su estilo poco a poco se reflejará: “me quedo con que los jugadores hicieron lo que les pedí, queda regular”.
Por último, y pese al panorama, aclaró que jugará el cierre de partido con todo en búsqueda del milagro que les de el boleto a la Liguilla.
“Nos quedan cinco finales, yo apelo a la continuidad. Mi equipo tiene que tener en la mente la portería rival, pero somos conscientes de que tenemos que defender bien, el equipo hoy intentó. El equipo tiene calidad, tenemos que hacer creer a los aficionados”, sentenció. (Miguel Ángel Mújica)