POR RUBÉN RODRÍGUEZ

El regreso de la Fórmula Uno a México ha sido todo un acontecimiento en cualquier ámbito de la sociedad, el nivel de expectativas por la llegada del magno evento ha superado todo lo que se podía esperar, y para Enrique Peña Nieto, presidente de los Estados Unidos Mexicanos, no pasó desapercibido y ayer visitó el renovado circuito del Autódromo Hermanos Rodríguez.

El primer mandatario llegó alrededor de las 13:10 y de inmediato se hizo una gran movilización. Peña Nieto se subió a un “carrito de golf” y dio un recorrido por toda la pista acompañado de Jean Todd y el patrón de la Fórmula Uno, Bernie Ecclestone.

Acto seguido se paseó por todo el Paddock y saludó a los pilotos mexicanos, Esteban Gutiérrez y Sergio Pérez, quienes estuvieron alegres por la distinguida visita.

Checo aprovechó la oportunidad para mostrarle el volante de su bólido y le dio una breve, pero sustancial explicación de la utilidad que tiene cada uno de los botones que lleva la vital pieza del coche.

Por su parte Esteban Gutiérrez lo saludó muy efusivo y seguramente le comentó que la próxima temporada ya estará montado en un coche de la nueva escudería Haas, con lo que el regiomontano terminará con la sequía de un año alejado de las pistas de la máxima categoría del automovilismo mundial.

También saludó a Lewis Hamilton, con quien intercambió algunas impresiones y lo felicitó por el título conseguido en esta temporada 2015 de Fórmula Uno. Lo mismo hizo con el español Fernando Alonso, que salió de su hospitality para saludar al presidente.

La visita de Enrique Peña Nieto duró aproximadamente 15 minutos, pero para los protagonistas del gran evento fue de mucha importancia que hubiera llegado a saludarlos tan importante personalidad.