POR ABIGAIL PARRA/ @abiparra_hdz

QUE se encomienden a todos los santos, que los astros se alineen, que las cartas salgan a su favor; no hay más para La Máquina. A pesar del cambio de entrenador y de la llegada de varios refuerzos para esta temporada, Cruz Azul no consiguió una vez más el objetivo. Y es que si bien le restan tres partidos por disputar, lo máximo que podría alcanzar serían 25 unidades; sin embargo, el octavo lugar de la general en este momento es Veracruz, que cuenta con 23 unidades, al que también le faltan tres duelos que hacen casi imposible la hazaña para los cementeros.
Así que este sábado, al conseguir el empate contra los del Puerto Jarocho, La Máquina casi firmó su tercera temporada consecutiva sin clasificar a la fiesta grande del futbol mexicano. La última vez que disputaron la instancia final fue en el Clausura 2014, bajo en mando de Luis Fernando Tena, en esa campaña no pasaron de cuartos de final al ser eliminados por el León.
Los de La Noria han sido un recurrente invitado a la pelea por el título. Sólo en torneos cortos han faltado en ocho ocasiones, sin sumar estas tres últimas (A-2014, C-2015 y lo más probable este torneo).
Tomás Boy llegó con el fin de mejorar la situación de los cementeros, de tres juegos dirigidos en Liga MX sólo ha ganado uno y dos empates, es invicto; sin embargo, esto no es suficiente, pues desde su llegada, en la fecha 13, la forma de alcanzar la clasificación era con victorias y poder así sumar la mayor cantidad de puntos que lo sacaran del fondo de la tabla general, de donde sólo en la jornada tres salieron para ubicarse en la sexta posición y de ahí rondar entre la décima e incluso en la semana 18 fueron últimos.
Por lo que La Máquina deberá pensar en enderezar su camino hasta la próxima campaña, en la cual se podría dar un armado a gusto y disgusto del “Jefe”, que faltaría ver si firma para continuar o termina el semestre como hasta ahora había acordado con la directiva celeste.