QUERÉTARO.- El que no arriesgas no gana…

Este viernes, Pablo Maríni y Puebla apostaron por el empate en la Corregidora y lo lograron, así que con el punto obtenido en un frío empate 0-0 ante Querétaro, La Franja se coló a la Fiesta Grande del balompié mexicano al llegar a 27 puntos y con esto obliga a Jaguares, Monterrey Monarcas y Veracruz que se enfrentan esta noche a ganar para obtener el último lugar que queda vacante.

Los camoteros no solo se meten a las finales, también se alejan un poco más en la lucha porcuentual, asegurando un gran torneo para Marini, quien hasta el momento ha cumplido con los objetivos impuestos por la directiva.

Por su parte, Querétaro se despide de este Apertura 2015 y rezando porque André Pierre Gignac o Rogelio Funes Mori no logren realizar más de tres goles y arrebatarle el título de goleo a “Tito” Villa, quien es el campeón virtual.

Asimismo, los aficionados emplumados probablemente vieron el último duelo de William Da Silva, Orbelin Pineda y Tiago Volpi con la playera de Gallos, pues son los candidatos a salir del “gallinero”.

EMOCIONES EMPLUMADAS

El grito de gol se ahogó en las miles de gargantas queretanas.

La pelota parecía incrustarse en las redes; los seguidores emplumados se levantaron para celebrar lo que parecía una anotación de Dionicio Escalante pero el pequeño Carlos Gutiérrez Armas, quien resguardaba el poste izquierdo se estiró cual largo es en la línea de meta para salvar a La Franja, lo que generó un inmenso suspiro que estremeció los cimientos de La Corregidora en una noche friolenta, la cual congeló a ambos equipos, que por momentos parecían desentumirse y otorgaban emociones a las tribunas.

Querétaro saltó al campo con el deseo de despedirse de este Apertura 2015 con un triunfo; además, erigir a ‘Tito’ Villa como campeón de goleo y porqué no hacerle la maldad al Puebla y que dependiera su calificación de otros equipos, por lo que se volcaron al frente buscando la meta de Campestrini, quien gracias su estoica defensa no tuvo que emplearse a fondo, pues el “Pato” Araujo, Robert Herrera, el “Macue” Robles y Gutiérrez Armas apaciguaron las aguas y dejaron con las ganas a Villa, a Candelo y al propio Escalante de celebrar.

Por otra parte, los hombres de Pablo Marini se mostraron cómodos en la cancha y con el marcador igualado, ya que así estaban del otro lado de la Fiesta Grande, situación por la cual aguantaron algunos minutos los embates de los locales y posteriormente adelantaron líneas para llevar el duelo en una lucha encarnizada por el esférico en la mitad de la cancha, donde Toledo, Acosta y Paco Torres fueron las piezas claves para calmar la ira emplumada que se vio con las “alas” maniatadas por no lograr sus objetivos.

El silbatazo de José Alfredo Peñaloza desató los abucheos de los queretanos, ya que en los minutos finales del primer lapso ambos equipos se conformaron con la igualada.

ESPOLONES AFILADOS

Para el inicio del complemento, el “Rey Midas” echó toda la carne al asador y con afán de obtener la victoria, envió al campo al “Pájaro” Benítez y de esa forma darle más profundidad a su equipo por banda izquierda y encontrar por ahí la anotación que coronara a Emanuel como campeón de goleo, pero La Franja se paró con una muralla que continuó resguardando el “puntito” que los colocaba en la Liguilla.

Los camoteros intentaron nivelar el encuentro, pero el ingreso de “Sinha” volvió a Querétaro en amo y dueño del balón, pero a pesar de eso no tenían claridad en el ataque, lo que desesperó al público, quien presionó a base de abucheos, contexto por el cual los Gallos comenzaron a disparar a discreción a la meta visitante, pero la mira de los artilleros no estaba fina, por lo que los balones culminaban en las tribunas.

Con los locales volcados al frente, Marini dio instrucciones de jugar al contragolpe, estrategia que estuvo cerca de funcionar, pero Volpi evitó la caída de su marco erigiéndose como el héroe del encuentro.

La jugada enardeció a Gallos, por lo que Da Silva, el hombre que suena para conformar las filas del América para la próxima temporada ingresó al campo y de esa forma, el ataque local se observó más fluido, vertical y dinámico, al grado de “sacarle un susto” a los camoteros, quienes agradecieron al poste que detuvo el fogonazo de Benítez.

Los minutos transcurrían y el marcador no se movía, motivo por el cual La Franja continúo con su juego, esperando a Querétaro, hasta que el silbatazo final llegó y de esa forma, los poblanos se metieron a la Liguilla.