Irving, EUA.- Para cumplir con el protocolo, Vaqueros de Dallas (2-7) activó al mariscal de campo Tony Romo dentro de su plantel de 53 jugadores y sólo es cuestión de horas para que se concrete su regreso al emparrillado, en contra de Delfines de Miami (4-5).

Desde que Antonio Ramiro Romo se fracturó la clavícula izquierda hace un par de meses, cayó una “maldición” sobre la franquicia de la “Estrella Solitaria”, la cual perdió los siete compromisos afrontados sin su quarterback titular.

Por los controles azul y plata desfilaron Brandon Weeden, despedido para dejar su lugar en el róster a Romo, y Matt Casell; ninguno supo darle una alegría a su afición y entre ambos se encargaron de poner al equipo en el fondo de la División Este en la Conferencia Nacional (NFC).

A principios de noviembre, el veterano de 13 campañas de experiencia comenzó a recuperar sensaciones con discretas prácticas, hace dos días se integró de lleno a los entrenamientos colectivos y será este domingo, sobre el emparrillado del Sun Life Stadium, cuando se consume su ansiado regreso.

Como medida de precaución, el pasador de los “Boys” empleará una protección por abajo de sus hombreras y de antemano sabe que la mayoría de los reflectores se posarán sobre él en esta undécima semana de acción en la temporada 2015 de la NFL. Notimex