LEÓN.- Antes de pensar en Liguilla y del primer rival en la instancia de Cuartos de Final, Juan Antonio Pizzi deberá arreglar la situación que se vive en el León, pues hay una serie de diferencias entre jugadores y entrenador que hacen que el plantel pueda reflejar en la cancha la problemática de un vestidor roto.
Y es que Pizzi, tuvo problemas con el arquero Christian Martínez, portero que estuvo como titular en todo el torneo hasta el sábado pasado en el que recibieron a Dorados y el estratega esmeralda colocó William Yarbrough. La noticia se le adelantó al Martínez el jueves pasado con el argumento de que “simplemente así lo sintió” y no por ideas futbolísticas o desempeño de ambos arqueros.
Dicha contestación molestó a Martínez, quien le reclamó que por qué no sentaba a jugadores que llegaban después de una “fiesta” a los entrenamientos y se retiró del entrenamiento.
Rodrigo Fernández, vicepresidente de León, se dio cuenta del altercado y llamó al dueño del club, Jesús Martínez, en busca de que pusiera un alto a la situación. Martínez habló con el cancerbero y lo convenció para que se reincorporara a los entrenamientos y el arquero así lo hizo.
Sin embargo, Christian habló con sus compañeros sobre la situación, y al final la mayoría de ellos coincidieron en que no soportaban más a Pizzi. Es así que el panorama en plena Liguilla no luce nada favorecedor para el entrenador de la Fiera, además en TDN se anunció que son varios los momentos en los que jugadores y el argentino han tenido discusión, pues incluso no convive con ellos en firmas de autógrafos o tampoco visita un concurrido restaurante del que Mauro Boselli, Carlos Peña, José Juan Vázquez, Christian Martínez , Jonnhy Magallón e Ignacio González son socios y hacen convivencias con el resto del plantel.