Londres, 13 dic (EFE).- Un gol del belga Divock Origi en la prolongación evitó el triunfo en Anfield del West Bromwich y la derrota del Liverpool (2-2), en el encuentro de la decimosexta jornada de la Premier.

El conjunto de Jurgen Klopp parece estancado tras la mejoría que mostró con la llegada del preparador germano. Se han dejado cinco puntos los reds en los dos últimos partidos. Cayó contra el Newcastle en el pasado partido e igualó, como local, frente al West Bromwich.

Y eso que el Liverpool tomó ventaja a los veinte minutos con el gol de Jordan Henderson a pase de Adam Lallana.

El cuadro de Klopp, sin embargo, no frenó la reacción de su rival, que empató a la media hora por medio de Craig Dawson después de una acción del venezolano Jose Salomón Rondón.

El Liverpool acusó el empate. El West Bromwich aprovechó las imprecisiones de su rival y el sueco Jonas Olsson puso por delante a los visitantes tras un centro de Chris Brunt.

Klopp movió ficha y recurrió al belga Divock Origi, que saltó al campo en el minuto 79 en el lugar del croata de origen bosnio Dejan Lovren. Le respondió el joven ‘red’ a su técnico y en el tiempo añadido, marcó el tanto del empate tras una jugada de Henderson.

Es noveno el Liverpool, fuera de los puestos europeos mientras el West Bromwich, que sumó su tercer empate seguido, suma puntos para alejarse de la parte baja de la clasificación