NANJING, China.- La delegación mexicana que competirá en los II Juegos Olímpicos de la Juventud arribó a Nanjing, ciudad sede de este certamen avalado por el COI, y de inmediato fue trasladada a la Villa.
Con rostros de asombro y algunos con un poco de cansancio, los atletas mexicanos sintieron ya el ambiente olímpico desde su llegada a Shanghai, en donde en autobús finalizaron el viaje a esta ciudad de la provincia de Jiangsu. Patricio Razo mostró su satisfacción de haber llegado a China, y más porque tiene el objetivo de estar entre los mejores en la modalidad de gimnasia artística. Asimismo, el boxeador mexiquense William Zepeda está dispuesto a ir con todo en busca de una medalla, ya que al estar en esta ciudad el deseo aumentó más, igualmente porque es el único de su deporte en representar a México en el evento juvenil.

Y por su parte, los ciclistas esperan ansiosos el día de su competencia. A pesar de lo largo del viaje, el ánimo no decayó en el interior del avión, cada uno de los deportistas aprovechó el tiempo para hacer amigos, pues algunos no se conocían y fue el mejor momento para charlar. El uniforme fue como parte de su cuerpo, una piel de la que no se quieren desprender, ya que para algunos es como su escudo para salir en busca del triunfo, y desde luego, hacer soñar a sus amigos y familiares con estar en el podium. Los entrenadores se mostraron atentos a cada uno de sus pupilos, y una vez en China, ya sólo esperaban arribar a la Villa Olímpica. Bajo las notas de diversos estilos de música que se escucharon en el autobús, la caravana mexicana se encaminó a esta ciudad. Entre los deportistas que hicieron del último tramo del viaje ligero se encontraban los de natación.