PACHUCA.- Resuenan las primeras 12 campanadas del 2016.

Roldofo Pizarro alza su copa y empieza a comer, una a una, las uvas que representan los propósitos de Año Nuevo.

Ya se sabe: salud, dinero, amor…

Los anhelos de ‘cajón’ son el preámbulo para las metas en el futbol que, al fin y al cabo, son su pasión.

En primer orden: “Una de las metas que tengo es jugar con México en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro”.

Y luego: “También andar bien con mi equipo, el Pachuca, creo que la afición, la institución y nosotros ya nos merecemos estar en los primeros planos porque hemos sido un equipo muy irregular. El objetivo es ser regulares”.

Son los anhelos para el mediocampista de los Tuzos, que así arranca un nuevo ciclo de su vida, aspirando a dar el ‘estirón’ en los torneos que vienen.

DE LATERAL

Pizarro es uno de los jóvenes que despuntan con la camiseta azul y blanca.

El cuadro hidalguense ya recibió ofertas de muchos millones de billetes verdes por el tamaulipeco, quien será de los titulares para el Clausura 2016.

“Han llegado muchos refuerzos que nos van a generar competencia, así que debemos entrenar duro para estar en el once inicial”, puntualiza Rodolfo.

En su caso, está llamado a desempeñarse como lateral derecho.

“Trato de hacer las cosas lo mejor posible y aprovechar las oportunidades que me dan; ahora me están ubicando en ese puesto para que me acostumbre pero ya sobre la marcha veremos dónde juego”, señala.

 VA POR MÁS

La realidad es que, luego de cumplir 100 partidos oficiales con los Tuzos, el volante aspira a más.

“Conforme no estoy. Me pone feliz alcanzar una meta como esa de los 100 juegos, que pueden parecer poquitos pero tenerlos a corta edad me ilusionan para jugar más y convertirme en un futbolista más completo, con experiencia”.

Propósitos de Ano Nuevo que, esperemos, se cumplan por el bien de Pizarro y del Pachuca. (Omar Pérez Díaz/Sol de Hidalgo)