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15, agosto 2014 - 9:24

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Associated Press

Luis Suárez asegura que ha dejado atrás el mordisco fatal que lo privó de terminar la Copa Mundial, le valió una larga suspensión y lo alejó momentáneamente de toda actividad futbolística.

El internacional uruguayo fichó con el poderoso Barcelona, pero hasta ahora no había podido entrenarse con sus nuevos compañeros debido a esa sanción. Pero una apelación logró que por lo menos le permitieran iniciar las prácticas con Lionel Messi, Andrés Iniesta, Neymar y quienes lo acompañarán a partir de la nueva temporada.

Suárez comentó el viernes que la situación había sido complicada. “Era una situación que me hacía sentir incómodo. Estoy pagando un error que cometí y del que ya pedí perdón, pero esto se debe olvidar. Hay que pensar en el futuro, que es estar en el Barcelona, el Club donde había soñado jugar”.

El talentoso delantero admitió que haber mordido a su adversario italiano Giorgio Chiellini durante el mundial de Brasil fue un “error”. La severidad de la sanción debió haber tenido en cuenta el hecho de que fue la tercera vez que Suárez mordía a un rival en tres equipos diferentes.

Después que el Tribunal de Arbitraje del Deporte suavizó la sanción inicial, Suárez pudo entrenarse el viernes con sus nuevos compañeros en el Camp Nou.

“Estoy muy feliz de volver a sentirme jugador de fútbol y estar con los compañeros”, afirmó a los medios del club. “Tenía muchas ganas de empezar. Ahora hay que esperar para volver a jugar, tener contacto con la afición y tener la sensación de jugar en un estadio como el Camp Nou”.

Finalmente Suárez se manifestó “muy agradecido al club por todo lo que ha hecho por mí en las últimas semanas y días. Me han tratado muy bien y lo agradezco porque cumplo un desafío, como es jugar en el Barça”.

En la práctica en la Ciudad Deportiva estuvieron también Xavi Hernández y Marc Bartra. Neymar participó pese a no tener todavía el alta médica a la lesión padecida durante el mundial y Adriano practicó parcialmente.

La decisión del tribunal significa que Suárez podrá jugar un partido amistoso el lunes en el Camp Nou, cuando se presentará el equipo ahora bajo la conducción del nuevo técnico Luis Enrique. Pero no estará habilitado para jugar partidos oficiales hasta el 25 de octubre.

“Ahora tendré que esperar”, afirmó. “Tengo que estar listo para cuando me toque el turno”.

Suárez, de 27 años, llegó procedente del Liverpool por una cifra calculada en 130 millones de dólares.

El lunes el nuevo astro será presentado ante la afición durante la disputa del trofeo Joan Gamper, mientras el martes será la rueda de prensa de la presentación para los medios de comunicación.