Luego de la controvertida situación que se registró entre el dueño de Veracruz, Fidel Kuri (quien fue suspendido un año), y Edgardo Codesal, director del área técnica de la Comisión de Arbitraje de la Femexfut, se analiza que en la junta de dueños de equipos del futbol mexicano se modifique el reglamento de sanciones.
Las agresiones a los jueces, árbitros o silbantes en el futbol mexicano han tenido eco en el medio, sobre todo, aquellos en que los protagonistas son figuras que son mediáticos o que ocupan otros cargos fuera de la esfera deportiva.

Sólo hay que recordar el suscitado en 1982, donde los involucrados fueron el arquero de Cruz Azul, el argentino Miguel “Gato” Marín, quien para ese entonces era técnico, contra el árbitro Jesús Mercado. Esta acción generó un año de suspensión para el sudamericano.

O el más cercano, fue en el 2011 cuando el entonces dueño del Puebla, Ricardo Henaine, reclamó de manera airada la labor del árbitro Erim Ramírez por el supuesto mal desempeño del silbante en un juego entre su equipo y las Chivas del Guadalajara.

Estos episodios han marcado parte de la historia negra en el futbol mexicano y aunque se han tomado las medidas pertinentes, los hechos siguen como el que protagonizaron Kuri y Codesal, director del área técnica de la Comisión de Arbitraje de la Federación Mexicana de Futbol (FMF).

Ante este panorama, se planteó que se deben de modificar los castigos en estos casos, por lo que se prevé que en la asamblea de dueños, que se llevará a cabo en mayo, se trate el tema.