ZAPOPAN.- “¡Chivas, Chivas…” estremece a Matías Almeyda. El grito al unísono para los seguidores del Rebaño provoca una sensación especial en la piel, y Matías Almeyda, así lo siente: “Me dan ganas de jugar. Soy sanguíneo, soy muy sentimental, y les he dicho a los jugadores que daría cinco minutos por jugar en esta institución (Sic.). Me hubiese gustado, lástima que no soy mexicano”, dice sonriente.
Almeyda está identificado con los colores rojiblancos. “Sigo viviendo la misma pasión que desde chico me llamó River, y ahora, los colores rojiblancos me siguen, y tanto este escudo como el de River tienen mucha historia, entonces, va de la mano, hay que respetarlo”.
Chivas es mediático. Es un equipo del pueblo y para el pueblo, ante estas circunstancias, Matías señala: “Lo entiendo, lo comprendo, como también me doy cuenta que a veces está bastante desprotegido. Este Chivas del pueblo es mediático, porque he visto partidos en que no ha sido respetado a las decisiones que han considerado muchos árbitros”.
Pero aclara y alza la voz. “Ojo, no pido que nos regalen cosas, pero sí que sean justos con todos. También veo que no es respetado por los comentarios hacia su dueño, como tampoco de comentarios por momentos, y Chivas le da de comer a mucha gente, y en Argentina decimos que la pelota le da de comer a todos, entonces, respetémosla, y si aquellos que trabajamos en torno a la pelota la protegemos y somos solidarios y objetivos, todos tendremos mejor trabajo y paz, y que sea un espectáculo”.