ERA cuestión de tiempo y que las agendas de Leonel García y Noel Schajris empataran, para presentarse en el Auditorio Nacional e iniciar su gira que lleva por nombre “Una última vez”. Además de que ya era un compromiso pendiente con un mundo de fans. De momento quedó de lado la separación que tuvieron hace algunos años para realizar proyectos en solitario, en donde cumplieron cada uno el objetivo que se habían trazado.

Anoche, la postal de un lleno total de este bello recinto estaba conformada por miles de parejas de enamorados, señoras, señores y jóvenes que no querían perderse esta presentación que a decir de los propios cantautores es el inicio de la gira definitiva como dueto Sin Bandera.

El concierto dio inicio en punto de las 21 horas con la canción “Una última voz” y de ahí se desplegaron las ya conocidas como “Que lloro”, “Suelta mi mano”, “Que me alcance la vida”, “Tócame”, “Mientes tan bien”, y uno de sus mayores éxitos, “Kilómetros”, y como era de esperarse, cantaron la melodía que está escuchándose actualmente y que es parte del nuevo CD, “En ésta no”, y al instante se escuchó que es parte del sello musical que los mantuvieron por años en los primeros lugares.

La noche avanzaba lleno de contrastes ya que los asistentes reían, cantaban, lloraban y pedían al dueto que ya nunca más se separen. Fue una noche de gritos de emoción y por supuesto una gran admiración por estos dos grandes cantantes.

En la parte media del concierto y para prender a todo el público, ofrecieron acompañados de sus ocho músicos “Junto a ti”, “Sobre mí” y “Sirena” y todos extasiados seguían al dueto en toda locura que realizaban. Brincaron, bailaron y rapearon, situación que en definitiva provocó una locura inmensa.

Noel con su piano y Leonel en la guitarra, deleitaron segundo a segundo a todos los que abarrotaron uno de los mejores recintos del país, a la vez que arrancaron suspiros a diestro y siniestro; fue un concierto esperado por todos, motivo por el cual querían que la noche no se acabara.

Y después de una noche maravillosa en donde se conjugaron las lágrimas, los aplausos, el amor verdadero, el incondicional, el secreto, tenía que terminar y de una manera más que con broche de oro, los aún Sin Bandera cantaron “Te vi venir” y “Entra a mi vida”, y con ello les llovieron carretadas de aplausos para despedirlos.