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Mira

1, marzo 2016 - 21:46

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Nota-Fut-Gallos

WASHINGTON, DC.- Si los Gallos cantaron en la capital de Estados Unidos, Washington, al igual que en La Corregidora, y se clasificaron a las semifinales de la Concachampions, fue gracias al portero brasileño Tiago Volpi, quien atajó tres claras de gol y un penalti, aunque fue vencido por el alemán Büecher, para quedar 1-1 en el estadio Robert F. Kenedy ante el DC United, y ganar la contienda de cuartos de final, al son de 3-1.

Aunque necesitaba tres goles para poder acceder a la antesala por el título, el DC no tuvo la tranquilidad necesaria para poder acercarse con peligro a la meta de Tiago Volpi, quien se agigantó nuevamente para atajar todo lo que los locales le enviaron en la primera parte.

Y en el pecado llevó la penitencia el equipo estadounidense, ya que apenas a los 3 minutos ya tenían la tercera estaca clavada, por el gol conseguido por Sepúlveda, en una asistencia magistral del “Pájaro” Benítez. Con esto, el cotejo se volvió con todo a favor para los queretanos, que se pasearon por la cancha del Robert F. Kennedy y dejaron en la lona a los locales.

Víctor Manuel Vucetich, el “Rey Midas”, se deleitó entonces con el control del balón, aunque el DC quiso reaccionar y empezó también la fiesta de Volpi, quien a los 10 minutos desvió un disparo enemigo para mandar a un lado.

Un contragolpe de los Gallos entre el maestro “Sinha” y Benítez no pudo ser concretado por el segundo y todo se quedó en aproximación, y minutos más tarde, el mismo paraguayo Benítez erró otra más.

Pero la figura del cancerbero brasileño se haría más grande en el complemento. Martínez derribó casi de manera circunstancial a un delantero del DC United al 54, y un minuto más tarde, Rolfe dispararía para la atajada de Volpi, que echó a un lado el esférico.

Gallos se volvió a crecer y en un contragolpe Borstein tuvo el segundo de los emplumados, pero vació su disparo apenas a un lado y dejó a los seguidores que siguieron a su equipo con el grito ahogado en la garganta.

Poco antes de que finalizara el juego, al 83, llegó el justo premio del cuadro de Washington, y por medio de Büecher, alemán que apenas había ingresado al terreno de juego, venció por fin a Volpi, quien sólo vio cómo una raya se incrustaba en su portería.

El 1-1 de poco le sirvió a los locales y de mucho a los queretanos, que no hicieron tantos aspavientos al pasar a las semifinales, ya que saben que lo más peligroso viene más adelante, en la antesala por el título, donde espera rival.

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