YA se sabe que el domingo estará en la plaza Silverio Pérez de Texcoco el controvertido torero Rodolfo Rodríguez “El Pana”, quien actuará como único espada en la lidia a muerte de seis toros de Real de Solera, en lugar del mano a mano que se había previsto con Miguel Cepeda El Breco, pero por lesiones no podrá torear.

Más que interés y expectación esta su primera “encerrona” ha despertado curiosidad sobre todo con un dejo de duda entre los aficionados, quienes se preguntan si “El Pana” tendrá el fuelle suficiente para aguantar esa maratónica jornada para él de acuerdo con la edad que tiene y a la vida desordenada que ha llevado.

Todo se puede esperar de Rodolfo Rodríguez, quien está curtido por la vida, pues de siempre ha sido un torero que ha corrido la legua, no de palabra, como muchos que únicamente lo dicen pero no; las vicisitudes que ha tenido “El Pana” son de puro sufrimiento, como para una telenovela.

El tlaxcalteca ha sabido resolver esos problemas que se le han presentado y se mantiene vigente. No será un torero de arte, de temple, pero sí ha vivido la fiesta en toda la extensión de la palabra, pero en esta su primera  “encerrona” no es para demostrar si tiene un amplio repertorio de lances y suertes como deben manejar los que actúan en solitario. Él tiene un amplio repertorio, tanto de los que normalmente se presentan como los de su inventiva. Además, tiene un cúmulo de recursos para salir airoso.

Son muchos los que han actuado como únicos espadas y pocos los que han sabido resolver los problemas que se presentan en solitario. A “El Pana” sólo su condición física es la que lo puede hacer tropezar. (HSC)

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