10, marzo 2016 - 21:31
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Las polémicas son el pan de cada día para Tomás Boy.
Luego de haberse enfrascado en un pleito con Darío Benedetto en el clásico joven, el cual le costó dos partidos de suspensión y posteriormente señalar que el himno de Pumas es “fascista”. El “Jefe” aceptó que se siente perseguido por algunos miembros de la Liga MX y negó que por expresar sus ideas sobre el protocolo universitario deberá ser motivo de sanción.
“No espero nada (castigo), hay libre expresión en este país, La Concacaf no permite ese tipo de rituales y nosotros lo tenemos que escuchar a fuerzas, ya es obligatorio y la verdad todos los equipos se quejan de eso. Han sido recurrentes algunas situaciones que pueden interpretarse como errores, pero han sido seguidas. Yo estoy tranquilo, yo sólo me refería al ritual”, puntualizó, no sin antes dejar en claro que continuará festejando a su modo, aunque ahora lo hará directamente a su propia banca: “La esencia no cambia, siento que estoy perseguido por algunos. No me refería a alguien en especial contra América, así me expreso y es mi gusto si no, pues no sería yo. Ese día me enganché con la banca de América, pero no celebré en contra de ellos, he visto otro tipo de manifestaciones de otros entrenadores que no está cerca de los medios de comunicación que son excesivas, me parece exagerada la visión hacia mi persona y acepto lo que viene”, dijo mientas sonrió por volver a: “estar sentadito en mi banquita”.