POR GUILLERMO MARTÍNEZ GONZÁLEZ

EL verdadero rock hizo estallar las vértebras de la luna. Los Rolling Stones por cuarta vez pisaron tierra azteca, dentro de su gira por Latinoamérica.
Fue un gran ritual con los mejores éxitos de sus satánicas majestades que deleitaron a más de 50 mil almas congregadas en el Foro Sol con la lengua inglesa en sus playeras.
El incansable Mick Jagger corría de un lado a otro, animando y alentando al respetable, mientras que Keith Richards, Ron Wood y Charlie Watts completaban el ritual durante las canciones “Start me up”, “It’s only Rock and Roll”, “Let’s spend the night together”, “Paint it black”, “Honky Town woman” y “Satisfaction”, “Angie”, entre otras.
“Hola, México. Hace diez años que no veníamos. La vez anterior tomamos tequila, ahora fue mezcal “, gritaba iracundo Jagger a sus 73 años.
Sus majestades lograron conjugar al público en una armonía de blues y rock hasta catapultar las horas, los instantes en que las luces pasaban veloces por las cabezas de esos miles de seres que no paraban de alabarlos, de mirar que todavía son la leyenda que comenzó a hacer estallar los escenarios con sus estruendos riffs hace cuatro décadas.
“Ustedes son chidos” y los presentes de todas las edades se ponían a los pies de los músicos.
Nadie quería despertar del éxtasis que provocaba escuchar a la leyenda de la lengua inglesa. De sus quimeras siderales expresadas en sus letras, guardando en la mente las inconmensurables formas que ofrece un verdadero concierto.
Fue un duelo con la existencia, de la que salimos ganadores quienes presenciamos cómo The Rolling Stones apaciguaron el deseo de volverlos a ver en vivo.
Y sí, la leyenda continuará por otros años más.
Gracias, The Rolling Stones por esta inigualable velada.

TARJETA INFORMATIVA
El Gobierno de la CDMX informa que no tiene prevista la celebración de un concierto de The Rolling Stones en el Zócalo capitalino, como se ha informado y difundido en algunos medios y redes sociales.