POR A. G. GONZÁLEZ

LA diferencia entre los números que tenía después de once jornadas del Apertura 2015 y el Clausura 2016 podría parecer mínima y la comparación de estadísticas exagerada. Sin embargo, para el proceso de Ignacio Ambriz y en especial para el técnico del América, este avance, por mínimo que parezca, resulta tranquilizador.

Pero el camino en el presente torneo no ha sido de tanta serenidad y ha tenido, nuevamente, momentos de alta tensión y constantes cuestionamientos respecto a su estilo y la manera en que han sacado algunos resultados.

El Clausura inició con la asignatura de volver a hacer que el estadio Azteca pesara y diera puntos a las Águilas, que de visita habían manifestado no tener problemas con Ambriz. Fue hasta la jornada 5 cuando lograron ganar en casa (2-0 a Santos) y a partir de ese momento ya no han perdido en su territorio, tras acumular otros dos triunfos y un empate en el clásico capitalino frente al Cruz Azul.

De hecho, esta versión del América solamente ha perdido en dos ocasiones, curiosamente por el mismo marcador (J3 ante Pachuca 1-4 y J8 en Tigres 4-1). A diferencia del torneo anterior, los azulcrema han empatado tres veces cuando en el Apertura no consiguieron igualada alguna sino hasta la última jornada cuando repartieron puntos ante los Pumas (1-1).

Y aunque en las estadísticas son similares -con aquello de los empates de diferencia-, en estos momentos, el equipo de Ambriz se encuentra en la tercera posición con 21 puntos, solamente tres debajo del líder Monterrey al que enfrentarán en la jornada 16 y de mantenerse esta situación, dicho partido podría definir un mejor acomodo de cara a la Liguilla.

A estas alturas del torneo anterior, las Águilas se encontraban en el quinto puesto con 18 puntos, seis por debajo del entonces líder León.

Además, el cuadro americanista todavía tiene que jugar la semifinal de vuelta de la Concachampions ante el Santos, y a pesar de tener que combinar a sus futbolistas para ambos torneos en los que compite, Ambriz no se ha visto tan apretado.

Es más, el estratega azulcrema ha tomado decisiones importantes en momentos clave, como la de mandar a la banca a Moisés Muñoz para convertir en titular a Hugo González por los partidos de la Liga MX. Esto ocurrió a partir de la jornada 9, y desde entonces, las Águilas han ligado victorias (Morelia, Guadalajara y León), con todo y que han recibido un gol por partido.

Otro de los movimientos que en un principio fue obligado por lesión fue el de la titularidad de Osmar Mares en lugar de Miguel Samudio, además de que el estratega americanista parece haber recuperado el futbol de Darwin Quintero, quien a la ausencia por lesión de Darío Benedetto se ha vuelto a conectar con Oribe Peralta (quien además se ha puesto en el segundo sitio del goleo individual con siete tantos), y el resto de los ofensivos americanistas.

Este América y en especial Ignacio Ambriz parecen vivir un buen momento y tendrán el descanso de la fecha FIFA para recuperar a quienes han sufrido desgaste por las competencias, y regresar a la actividad en busca de mantener la inercia que les ha hecho mejorar sus números del primer torneo de Ignacio Ambriz como técnico al presente.