LA operación fue todo un éxito y “Chaconeitor” está listo para la batalla.

Tras un par de horas de cirugía, el médico Ricardo Cienfuegos le colocó tres placas de titanio a Christian Giménez en el pómulo del lado izquierdo, lugar donde presentó cuatro facturas, específicamente en el arco y el hueso cigomático.

El camisa 10 de La Máquina arribó a muy temprana hora a un prestigioso hospital en Colonia Roma de la Ciudad de México para realizarse la operación, donde además permaneció toda la noche con el afán de observar la evolución del futbolista.

Minutos antes de entrar al quirófano, “Chaco” se dijo molesto por la lesión, debido a que llega en su segundo mejor momento con La Máquina.

“Fue un madrazo durísimo, no sé si haya sido intencional, mi molestia es por el equipo, yo ya estaba levantando mi nivel, estaba contento, y bueno, me toca vivir esto y lo enfrento con mucha entereza”, mencionó para una televisora especializada en deportes.

Asimismo y antes de que la anestesia hiciera su trabajo, Giménez afirmó que a pesar de las diversas lesiones que ha sufrido dentro de las canchas no piensa en colgar los botines, por lo que amenazó que habrá más del “Chaco” en los campos de juego.

“Yo me siento mejor con mis 35 años, es cierto que voy a parar durante cuatro a seis semanas pero estoy muy contento con lo hecho, trabajo todos los días para que eso se note y habrá un momento en que diga ¡ya basta!, pero en estos momentos me siento bien”.