TOLUCA.- No hubo diablura, ni santo de cabeza. Este viernes por la noche, en el estadio Nemesio Díez, tanto Toluca como Santos Laguna se neutralizaron y terminaron con empate sin goles, 0-0. Los escarlatas ven cada vez más lejos sus posibilidades de meterse en la pelea por el título, mientras que los laguneros, en caso de darse algunos resultados de otros equipos que le persiguen en la zona de Liguilla, podría salirse de ésta.

El encuentro inició con llegadas a ambas porterías, pero Talavera y Marchesín se encargaron de echarle hielo al asunto y todo se quedó en mera exclamación para los asistentes, que vieron cómo desde muy temprano Lucas Lobos abandonaba el encuentro y la peligrosidad local se empezó a diluir.

Mientras tanto, los visitantes se dedicaban a cuidar el resultado, al ver que el Diablo se empezaba a perder en el encuentro y así se fueron los primeros 45 minutos, si nada, pero nada qué contar ofensivamente.

El complemento en sus primeros minutos fue una copia del juego que mostraron ambas escuadras en la parte inicial. Nada de nada en ambas áreas.

Y fue hasta los últimos 20 minutos cuando José Saturnino Cardozo no aguantó más y empezó a echar gritos al por mayor, enfurecido por el pobre espectáculo de sus pupilos, que parecía que no entraban en razón de la situación reinante en cuanto a su posible clasificación a la Liguilla.

Y al 72’ Carlos Esquivel ensayó sendo disparo que se fue apenas afuera del marco de Marchesín, que de inmediato reclamó a sus compañeros por dejar que el mediocampista de los escarlatas disparara.

Y la respuesta vino enseguida. Gran disparo de Santos Laguna que Alfredo Talavera desvía de gran forma para mantener en cero su portería.

Nuevamente fue Toluca quien tomó la iniciativa y en un centro al área, Paulo da Silva la puso arriba del marco defendido por Marchesín. El encuentro se elevaba en intensidad, pero ninguno de los dos equipos atinaba a hacer daño.

En el minuto 90 llegó la más clara con un mano a mano entre Djaniny Tavares y Tala, que ganó el segundo al tapar el balón que envió el de Cabo Verde.

Y en una de las últimas del partido, el defensor Jorge Flores punteó un balón que pegó en el poste de su propio marco y luego llegó Marchesín para tomarla. Vaya susto para los laguneros, que milagrosamente se salvaron en el Nmesio Díez.

Empate sin goles, que deja lejos de los punteros al Toluca y a Santos a la deriva en el pelotón de Liguilla.