FOTOS: ÉRIK ESTRELLA/@erikesto73

VERACRUZ.- Dos autobuses turísticos salieron del estadio de madrugada para comenzar con el recorrido por las principales calles veracruzanas.

En un vehículo se transportó el equipo mientras que en el otro hubo familiares, amigos y medios de comunicación, el único ausente fue el “Maestro” Reinoso, Carlos optó por descansar.

Decenas de aficionados acompañaron al equipo durante todo el trayecto, las banderas y mantas se multiplicaron.

El trofeo logrado horas atrás se convirtió en el mástil que dirigió al autobús, el “Keko” Villalva, Gabriel Peñalba, Leobardo López y Fernando Menses fueron los más eufóricos, los tres mostraron la copa con orgullo.

El recorrido siguió por todo el Malecón, a la luz de la luna y con el ruido de las olas el festejo continúo.

Luego de un trayecto de casi una hora el camión llegó a su destino, el numeroso público dificultó el traslado al punto final.

Una vez instalados en la Macroplaza los jugadores subieron a un templete, el enorme trofeo los acompañó.

Cerca de dos mil seguidores vitorearon a sus ídolos, el “Keko” dirigió los cánticos, Daniel se divirtió a lo grande.

Fidel Kuri Mustieles también formó parte de la fiesta, el líder de los escualos gritó a todo pulmón el título logrado.

La música, el baile y las luces de colores siguieron por varios minutos más, los jugadores aprovecharon el momento para sacarse selfies.

Al filo de las 3:00 horas el festejo comenzó a extinguirse, los futbolistas se despidieron de su público y regresaron al autobús.

El caos se presentó por algunos momentos, entre empujones y alboroto todo el plantel logró volver al vehículo.

Una vez todos abordo el camión arrancó, los jugadores volvieron al estadio y posteriormente rompieron filas.

Así fue el festejo de los jarochos, la ciudad enloqueció con su primer título luego de 66 años de espera.