El esgrimista Julián Ayala aseguró que acudir a unos Juegos Olímpicos es el resultado de muchos años de esfuerzo, pero también del deseo de trascender en un deporte no tan popular en México, en el cual se tiene que trabajar muchas horas al día y durante años.

Ayala, quien debutará en justas veraniegas en Río 2016, se mostró contento por representar a México en la cita olímpica y aseveró que acudirá no sólo a competir sino a dar lo máximo para seguir cambiando el curso de la historia.

“A Río no sólo vamos por competir, sino a cambiar la historia de la esgrima de México y, desde luego, la mía”, comentó.

A tres meses de los Juegos Olímpicos, el especialista en sable sostuvo que el panorama para México es bueno por el nivel de sus compañeros, que pueden trascender, pero también se debe tomar en consideración a los demás competidores, quienes tienen más fogueo y experiencia.

“Estar en unos Juegos Olímpicos representa todo para mí, de muchas horas de trabajo y de estar lejos de la familia; por eso cuando se compite en este tipo de justas, es algo que nos deja satisfechos por todo lo que hubo detrás”, externó.

Indicó que se enfocará en afinar los detalles para salir a la pista olímpica con una buena determinación y desde el primer combate se debe pensar en ganar para llegar a la final.

“Sé que es difícil, pero no imposible, la verdad ya quiero estar en la competencia y tener mi primer combate. A los rivales los conozco, pero en justas como los Juegos Olímpicos siempre depende de cómo sale y cómo están motivados”, destacó.

Afirmó que esta será la primera vez que México acuda a Juegos Olímpicos con ocho integrantes y eso es por la manera de trabajar de todos, desde la dirigencia de la Federación Mexicana de Esgrima hasta lo hecho por cada uno de los competidores.

“Creo que desde 1968, cuando las olimpiadas fueron en México, no había representación numerosa en Juegos Olímpicos y ahora la historia es otra y todos, los ocho, vamos por hacer algo importante”, destacó.