Tras caer en el encuentro de vuelta de los cuartos de final frente al León. Monarcas asistió por última ocasión en el semestre al estadio Morelos, donde bajo el mando de Enrique Meza y Daniel Ipata, los purépechas realizaron una práctica regenerativa, para aflojar los músculos e irse de receso veraniego sin alguna lesión o algún problema muscular.

Al concluir el entrenamiento, la directiva michoacana encabezada por Roberto Hernández Ayala, vicepresidente deportivo platico largo y tendido con jugadores y cuerpo técnico expresando los planes del equipo para el siguiente año, en el que nuevamente la prioridad será la permanencia en el máximo circuito.

Al finalizar la reunión, los futbolistas de Morelia comenzaron abandonar el Coloso del Quinceo, algunos con premura pues ya ansiaban disfrutar a sus familias en las playas de nuestro país, mientras algunos otros tomaban sus pertenencias con calma y desde una trinchera observaban el duelo de Monarcas de Segunda Division. El duelo concluyó en punto de las 15:00 y fue el momento en que Felipe Rodríguez, Carlos Adrián Morales, “Chato” Rodríguez subieron a sus autos para resguardarse de la fuerte lluvia e ir a sus hogares.

Al salir del inmueble, intentamos charlar con los ídolos purépechas con el afán de conocer el análisis que realizaron tras un torneo donde mantuvieron la categoría y clasificaron a la Liguilla, pero la respuesta fue negativa. Rodríguez y la “Güera” salieron y únicamente nos saludaron, indicando que el equipo estaba tranquilo y orgulloso por el semestre que realizaron, para de esa forma continuar con su camino.

El último en abandonar la casa de Monarcas fue el Profe Meza; quien tiene la ilusión de continuar con los putépechas y volver a salvarlos del tema porcentual, pero su futuro se decidirá en los próximos días.

Ante la preocupación del tema porcentual, pues arrancarán el próximo Apertura 2016 con 1.1765 en el último lugar de la tabla del porcentaje. Los altos mandos morelianos se sentarán en la mesa para planear la siguiente temporada, en la cual se vislumbran diversos cambios, sobre todo en la parte de adelante, donde Monarcas padeció por falta de gol, pues ni Pablo Velázquez, ni Luis Gabriel Rey, ni Alejandro Gagliardi fueron los encargados de marcar diferencia.

En la zona baja también se vislumbran cambios, pues fue ahí donde más adolecieron los Canarios, pues Torsiglieri nunca pudo acoplarse, Loeschbor, Pérez y Erpen se solidificaron en las últimas jornadas pero ante León el nerviosismo los “mató”, y será un año decisivo para los pupilos de Meza, quien deberá hacer de su equipo una máquina imparable para evitar sorpresas del que ascienda. Necaxa o Juárez.