Los Golden State Warriors enfrentarán su más difícil piedra en el camino a la reválida de su título, cuando desde mañana lunes inicien una espinosa serie de playoffs de siete juegos contra los Oklahoma City Thunder, por el título de la Conferencia Oeste y el pase a la Final NBA.

El ganador de este compromiso irá por el campeonato contra el que venza en la serie de la Conferencia Este entre los ya clasificados Cleveland Cavaliers, y el ganador entre Toronto Raptors y Miami Heat, a definirse este domingo.

Los Warriors vienen de eliminar a Houston Rockets (4-1) y Portland Trail Blazers (4-1), demostrando su profundidad como equipo al tener que jugar varios partidos sin el concurso de su superestrella Stephen Curry, quien arrastró un lesión de tobillo y rodilla en esos desafíos.

Los de OKC dejaron en el camino de primera ronda a Dallas Mavericks (4-1) y sorprendieron al poderoso San Antonio Spurs (4-2), siempre a remolque de su dupla de Kevin Durant y Russell Westbrook.

Será una serie picante como esa salsa curry de la cocina asiática, con las banderas de cada equipo plantadas en torno a sus estrellas de fuste. Pero el factor común de este tope será Stephen Curry, elegido unánimemente hace unos dias, y por segundo año consecutivo, el Jugador Más Valioso de la temporada regular NBA.

Los Warriors barrieron a OKC 3-0 en los encuentros de temporada regular, con dos de esos partidos alargados a tiempo extra. Kevin Durant y sus compañeros todavía recuerdan con amargura aquel juego del 27 de febrero cuando un disparo de Curry desde mitad de la cancha les liquidó las esperanzas.

Los Thunder llegan estos playoffs completamente sanos por primera vez desde su viaje a las finales de la NBA en 2012, y tras ganarle a San Antonio demostraron tener las herramientas necesarias para vencer a los campeones, e incluso aspirar a su primer título como franquicia.

Esta es la tercera vez que las dos franquicias se ven las caras en una final de Conferencia, y la primera desde el año 1992 cuando el Thunder todavía estaba en Seattle y Kevin Durant, Russell Westbrook, Klay Thompson y Curry eran todavía unos bebés que asistían a la guardería infantil.

– Los pronósticos –

Aunque pronosticar se torna en un ejercicio de alto riesgo en esta serie por la paridad de los rivales, la lógica y las estadísticas ayudan a aventurarse en la predicción de que Golden State ganará el tope en siete reñidos juegos.

Pero, y es el “pero” más importante de esta serie, todo dependerá de que Curry pueda evitar más lesiones en cualquiera de sus extremidades.

La capacidad anotadora de Curry, su liderazgo y presencia en la cancha, son casi el 50% de poder destructivo de los “guerreros” californianos.

Será un duelo principalmente entre Curry y Klay Thompson por Golden State contra Durant y Westbrook, pero en la que también jugarán un papel clave los actores de reparto como Draymond Green, Andre Iguodala y Andrew Bogut por los Warriors, y Serge Ibaka, Andre Robinson y Dion Waiters por OKC.

Se ha dicho que la manera de vencer a los Warriors es dominando en la zona de la pintura, y el entrenador OKC Billy Donovan podría tener la llave en su gran combinación de hombres altos como Ibaka, Steven Adams y Enes Kanter, quienes han situado a los Thunder como el equipo Nº 1 en rebotes esta temporada.

Los Thunder fueron devastadores capturando balones en aro ajeno. El 31% de todas capturas bajo las tablas -también los mejores de la Liga- fueron en zona rival.

Para los Warriors, es esencial minimizar el daño de Durant y Westbrook, Según estadísticas de la NBA, el 66% de los tiros del equipo pasa por las manos de esta dupla, o lo que es lo mismo: dos de cada tres jugadas de los Thunder acaban siendo resueltas por uno de sus dos astros.

Habría que ver si Green puede contener a Durant, algo en lo que fracasó Kawhi Leonard con San Antonio, y eso que ha sido ‘Defensor del Año’ dos veces consecutivas.