El tan famoso grito de ¡pu…! cada vez que el portero rival despeja desde saque de meta ya no es un juego.

El grito ya le dio la vuelta al mundo y FIFA no quiere perdonar una más con sanción económica, por lo que el Tricolor sería vetado del estadio Azteca y jugaría en otro inmueble, incluso de no enmudecer llegarían a choques a puerta cerrada, por lo que Guardado, ahora sí, espera el apoyo de la gente.

“Ojalá que nos obedeciera, no coincido en eso, lo que podemos hacer es subir campañas en redes sociales, que necesitamos a la gente, que necesitamos que estén en el estadio, seguiremos por este camino hasta que consigamos el quitar esa costumbre, no es algo ofensivo para mí, pero los que sancionan esto lo ven así, debemos hacer algo, cambiar esa costumbre”, precisó uno de los líderes del equipo.

Si bien comenzaron con la campaña “Abrazados por el futbol” y hoy toma fuerza con una nueva filosofía del “Ya Párale” bajo las figuras de Jesús Corona, Guillermo Ochoa y Alfredo Talavera, el único y mero objetivo “es tratar de cambiar ese hábito, como lo ha dicho hace poco Memo Cantú, que no se haga en plan ofensa el grito, pero deja de ser gracioso cuando hay sanciones de por medio que pueden afectar y que nos veten un estadio”.

Guardado no bajó la voz y pidió reflexión para los aficionados, ya que el Tricolor se vería afectado en el mismísimo hexagonal final de la Concacaf. “Nos vamos a encontrar con una situación complicada, deben hacer conciencia que son parte importante de conseguir el objetivo, ojalá pueda surtir efecto esta campaña, también pediría como medios que nos ayuden porque cuando ya hay sanciones deja de ser gracioso”.

Por su parte, Juan Carlos Osorio respeta a la cultura mexicana, pero pide frenar el grito para no sufrir un castigo innecesario. “Respetamos la cultura mexicana, pero si hacemos el esfuerzo por tratar de remediar esa situación porque no queremos que la Selección sufra un castigo innecesario y que pueda tener consecuencias graves”.