PASADENA.- El grito homofóbico de la afición mexicana que la FIFA busca callar traerá consecuencias graves para el Tricolor, una de ellas sería el veto en el estadio Azteca cuando México dispute el Hexagonal final de la Concacaf dentro de las eliminatorias mundialistas.

Sin embargo, Santiago Baños, director deportivo de la Selección, espera que esta medida no llegue, por más que ya rebasaron los límites de la FIFA en el pasado juego de Phoenix frente a Uruguay.

“Ojalá no lleguemos a lo del veto. No es un grito que beneficie. Hay gente que se siente afectada”.

Si bien hasta el momento no han recibido una notificación por parte del máximo órgano del balompié, el directivo entendió que “el vaso de la FIFA se va llenando, espero que no llegue a tope, se derrame y afecte lo deportivo”.

Una vez más le pidió a los seguidores reconsiderar el grito, que para él no es molesto pero para el mundo sí. “Tenemos que respetar el reglamento de FIFA y sí nos puede afectar. Hay que seguir por el mismo camino y tratar que la gente tome conciencia”, solicitó. (Luis García Olivo/ Foto: Jorge Barrera/Enviados especiales).