Como en cada museo, el objetivo principal de lo que en él se expone es mostrar cosas únicas y aunque todos son singulares a su manera, por su enfoque al deporte y al espectáculo en México ninguno se compara a Ídolos del Esto.En toda obra trascienden rastros de su creador y este recinto, ubicado en Guillermo Prieto número 7, en la Colonia San Rafael, delegación Cuauhtémoc, no es la excepción, ya que está plasmado de la personalidad de don Mario Vázquez Raña.En un comienzo, la colección era para deleite privado de este empresario que fue director de Organización Editorial Mexicana, organizador deportivo a nivel internacional y que resultó un nexo con las estrellas del espectáculo en México. Estas características están reflejadas a lo largo y ancho del recinto.

Ahora bajo la tutela de su hija, Marina Vázquez, el inmueble continúa presentando cuatro secciones importantes, breve historia de la imprenta del diario Esto, la Cámara de las Maravillas, la sección de estrellas de espectáculos y los artículos deportivos.Uno de los objetos de mayor realce es el que da la bienvenida en las puertas del lugar, la lápida del emblema mexicano Pedro Infante, que está acompañada de una permanente gala de sus mejores canciones.Carolina Laguna, auxiliar administrativo del museo, destaca que las personas que acuden a estas instalaciones se guían por estos dos elementos “y entran creyendo que este es el museo de Pedro Infante, en parte porque algunas de las exposiciones fotográficas tienen que ver con él”.

Al cruzar el umbral, el primer apartado presenta un libro en donde se pueden visualizar las primeras ediciones publicadas del reconocido diario, además de la indumentaria con que se imprimieron los números inaugurales, incluida una icónica máquina de escribir perteneciente al director en turno.

Posteriormente, acapara la atención un muro ilustrado por brillantes y singulares vestimentas pertenecientes a estrellas como el cantante José José, la actriz Yolanda Montez “Tongolele”, el vestuario de Eugenio Derbez al caracterizar a Ludovico Peluche, así como trajes de charro de la pareja Antonio Aguilar y Flor Silvestre.

Irina Escartín, coordinadora del museo Ídolos del Esto, resalta que “el principal objetivo de la creación del museo fue poder exponer al público parte de los reconocimientos y donativos que a lo largo de la existencia del periódico le hicieron a don Mario Vázquez Raña, todos fueron donativos de cada una de las personas a quien pertenecieron”.

Así hace referencia también a pequeños suvenires como un espejo y lápiz labial de Silvia Pinal y fotografías de esta actriz, la pelota de Carlos Villagrán en su papel de “Quico” y la regla fácilmente reconocible que castigó a Jorge Ortiz de Pinedo en La Escuelita.

En una sección intermedia que une la farándula con los deportes está la denominada Cámara de las Maravillas, un pequeño rincón con objetos de gran valor cultural como un trozo del muro de Berlín y réplicas de medallas de distintas competencias olímpicas, así como artesanías de culturas orientales.

Una vez instalados en la sala deportiva, la colección cuenta con verdaderas joyas como la pieza de mayor antigüedad, un balón de futbol de los años 30 y la más reciente añadida, la réplica de uno de los trofeos del club Toluca y la playera firmada por los jugadores cuando resultaron campeones en 2010.

Entre los más relucientes tesoros de diferentes épocas se encuentran los tacos de Hugo Sánchez, guantes de Raúl “Ratón” Macías, las máscaras de Blue Panther y Atlantis, así como un balóndel mundial de México 86, firmado por la Selección Nacional.

También resalta otra característica que definió la línea editorial de Esto, los toros, con una pared dedicada a exhibir el traje de luces de Miguel “Armillita” Espinosa, espadas, resguardadas por un par de cabezas de bovinos caídos en distintas funciones.

Diversas figuras han sido testigos de lo que el museo Ídolos del Esto presenta, mismos que dejaron su firma en tres libros, tesoros que a la larga bien podrían convertirse en un elemento digno de exponerse en las vitrinas. Por mencionar algunos autógrafos están el del reconocido a nivel nacional Marco Antonio Palacios “Pikolín” y la nadadora y medallista paralímpica Nely Miranda.

Esta colección se encamina a ocho años de apertura y en palabras de Irina Escartín, “esperamos que sea permanente, aunque ya no aceptamos más donaciones porque no tenemos el espacio suficiente, porque sabemos que todos merecen estar expuestos”.

Es así como la original exposición temporal Joyas del Esto se convirtió en una trascendente colección, muestra de cultura y que otorga un viaje al pasado, porque como lo dicen los visitantes, “te llena de recuerdos y recordar es volver a vivir”.