SANTA CLARA.- El líder natural de la Selección, Rafael Márquez, cargó de igual forma que sus compañeros con el fracaso chileno, pese a que se quedó sin ver minutos en la banca.

Uno de los capitanes de la Selección no jugó debido a la decisión técnica de Osorio, y “hay que respetar, poner mi granito de arena fuera y dentro de la cancha, me siento igual de responsable de la derrota del equipo como si hubiera jugado”.

El viaje relámpago a la ciudad tapatía por el nacimiento tapatío no fue pretexto para no verlo jugar. “Entrené bien, y en ningún momento me dijo que era por condiciones físicas, me sentía bien, motivado por hacerlo bien”.

Así que, “pese a estar en la banca, a todos nos dolió y avergüenza está derrota, y no hay más que poner la cara y aguantar las críticas, es la peor derrota que me ha tocado en la Selección. Aquí ganamos todos y perdemos todos, todos tenemos culpa”.