El estadunidense Dustin Johnson festejó el Día del Padre regalándose la corona del Abierto de Estados Unidos de Golf, reivindicándose de su actuación del año pasado, cuando al final perdió el título ante su compatriota Jordan Spieth.

Su primera corona la saboreó con una tarjeta dominical de 69 golpes, para concluir con un global de 276 golpes, cuatro bajo par. “Es un día del padre como ningún otro”, aseguró.

Al final del hoyo 18 lo esperaban su novia, Paulina Gretzky, y su hijo, Tatum. con quienes se fundió en un abrazo. “Mi familia significa todo, es mi mundo y esta victoria no pudo llegar en un mejor momento, cuando en dos días es mi cumpleaños”.

Su constancia dominical le ayudó escalar una posición para el primer lugar, ante un Jim Furyk con ronda de 66, para subir 19 puestos y finalizar como subcampeón con global de 279, uno bajo par, mismo acumulado por el local Scott Piercy y el irlandés Shane Lowry.