La primera favorita, la polaca Agnieszka Radwanska, y la checa Petra Kvitova, quinta, accedieron a los octavos de final del torneo de Eastbourne, del que se despidieron la italiana Roberta Vinci, segunda, y la española Carla Suárez, octava, en una jornada maratoniana y plagada de partidos.

La sesión fue intensa. Con partidos pendientes de la primera ronda y jugadoras que tuvieron que disputar dos encuentros en pocas horas para actualizar el cuadro de la competición.

Radwanska se benefició del abandono de la croata Mirjana Lucic-Baroni, con problemas físicos. La balcánica se retiró cuando la primera cabeza de serie ganaba por 6-4 y 2-1. Radwanska jugará en tercera ronda con la canadiense Eugenie Bouchard, que eliminó a la rumana Irina Camelia Begu, decimoquinta, por 6-3 y 6-1.

Kvitova, por su parte, también sacó adelante su duelo contra la húngara Timea Babos (6-4 y 7-6(5)) y tendrá como adversaria a la británica Johanna Konta, undécima favorita, que supero en dos mangas a la ucraniana Lesia Tsurenko (7-6 (4) y 6-1).

La puesta en escena de la italiana Roberta Vinci no terminó bien para sus intereses. La segunda favorita no pudo mantener su dominio y cayó ante la rusa Ekaterina Makarova, que remontó y ganó por 4-6, 6-4 y 6-3. En octavos jugará contra la alemana Andrea Petkovic, que tumbó a otra transalpina, Sara Errani, decimotercera, que venció en tres sets (6-1, 3-6 y 6-4).

La española Carla Suárez también se desmoronó. Fue de más a menos ante la japonesa Misaki Doi, que horas antes había jugado con la eslovena Polona Hercog su partido de primera ronda. La española no aprovechó el esfuerzo de su rival, que reaccionó, dio la vuelta a la situación y ganó el partido (3-6, 6-4 y 6-1).

La tenista nipona se enfrentará a la checa Karolina Pliskova, décima favorita, que superó a la australiana Daria Gavrilova por un doble 6-2.