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26, junio 2016 - 12:10

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NUEVA YORK, NY.- El estadounidense Keith Thurman, soberano welter de la Asociación Mundial de Boxeo, fue exigido al máximo pero salió airoso en su sexta defensa al llevarse una cerrada decisión unánime sobre su compatriota y ex campeón mundial Shawn Porter, en el combate estelar de la cartelera de este sábado en el Barclays Center de Brooklyn.

Como se esperaba, la contienda Porter fue intensa, con oponentes de experiencia que dejaron sentada su calidad desde que sonó la campana para marcar el inicio de las hostilidades.

El primer asalto arrancó con los dos buscando la pelea franca. Porter se acercaba con su rápido jab de izquierda seguido de combinaciones de cuerpo y cabeza que fallaba. Thurman lo medía buscando conectar su oper de derecha.

En el segundo, Shawn fue a la cacería con cruzados de derecha e izquierda y capeando todo lo que lanzo el campeón Thurman. Contra las cuerdas, Porter se vio dominante con bombazos al cuerpo inclinándose contra toda la humanidad sobre su rival.

El tercero fue de ensueño con Porter continuando su plan de ataque inclinado, pero Thurman comenzó a tomarle el tiempo y logro un derechazo a la sien del retador que obligó a éste a amarrar buscando capear el temporal.

En el cuarto round, repartieron metralla estilo Vietnam con los dos castigándose cuerpo a cuerpo. Thurman logró nuevamente conectar directo a la sien, pero Porter lo recibió con dos cruzados de derecha e izquierda.

El quinto lo continuaron calculando más los impactos y cada uno tratando de ver la distancia perfecta para conectar uno que fuera definitivo. El sexto giro muy difícil para los jueces, ya que Porter al igual que el monarca intercambiaron consistentemente cruzados y rectos que caían en casi iguales cantidades.

El séptimo pareció un poco mejor para Thurman, que avanzó siempre de frente y conectando con poderosos rectos de derecha a su persistente enemigo.

El octavo estaba casi parejo cuando Porter acertó con un potentísimo gancho de izquierda al cuerpo que dobló tan largo es al campeón Thurman. Éste se fue en retroceso buscando el amarre para evitar mayor daño.

El noveno no pudo ser mejor para Porter cuando los golpes al cuerpo comenzaron a pagar dividendos y lo logró al poner a Keith contra las cuerdas para administrarle más castigo en esa zona.

En el décimo rollo, el campeón tomó un segundo aire y comenzó a boxear a Porter, siempre en el medio del ring y logró cruzarlo con una derecha que lo hizo trastabillar, pero el retador se refugió en las cuerdas.

El episodio 11 nuevamente vio a Thurman conectar claro a la cara de Porter con una recta de derecha que frenó en seco el caminar del valiente retador. Thurman comenzó a alzar vuelo y a controlar más a su incómodo enemigo.

En el capítulo 12, con el público de pie en el Barclays Center lanzando aplausos, los dos gladiadores dieron el todo por el todo empujando hasta el cansancio con el coraje que solo los futuros inmortales del ring poseen. Al escucharse el gong final, se dejó a los jueces la difícil misión de declarar a un vencedor. En esos momentos el público ya era ganador por tan excelente combate.

Los tres jueces votaron 115-113 a favor del aún campeón Keith “One Time” Thurman, quien con esta victoria mejoró a 27-0, 22 nocauts. En cambio, Porter vio desmejorado su palmarés a 26-2, 16 noqueados y un empate.

Inmediatamente se habló de revancha y ambos contendientes dijeron estar dispuestos a aceptarla.

La pelea fue promocionada por DiBella Entertainment, y fue televisada por NBC en Estados Unidos, y Combate Space en América Latina. (Texto: Cortesía de Raúl E. Sáenz Luaces/Notifight)

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