POR FERNANDO SCHWARTZ

VAYA mecha la que prendió Michel Platini, presidente de la Unión Europea de Futbol (UEFA), cuando se refirió al caso de su compatriota Frank Ribéry, quien ya anunció que no desea seguir con la Selección de Francia, pero que el seleccionador Didier Deschamps lo quiere hasta la Eurocopa de 2016.

Pues bien, Platini estableció que por reglamento de FIFA, si Ribéry se niega al llamado será suspendido tres partidos. La regla, según el francés, establece que sólo si hay un acuerdo entre técnico y jugador la regla no opera.

En el caso del mexicano Carlos Vela, pertenece a un club europeo y estaría sometido a esta regla que Platini dijo que existe, y entonces, si Miguel Herrera lo llamara y no viene, tendría suspensión.

Claro, en el caso Vela, Miguel Herrera lo maneja como con todos los seleccionados. Primero, antes de convocarlos regularmente platica con ellos y después hace pública la lista, aunque ya en el camino le pasó que Jesús Corona se manifestó lesionado y que Carlos Salcido determinó después de la convocatoria ya no ir más a Selección.

Por supuesto que Platini abre el camino de la reglamentación, pero en realidad es difícil que esto llegue a suceder porque el técnico nacional nunca afectará ni llamará a un jugador que no quiere venir, porque a final de cuentas le entorpece su trabajo y al grupo.