Por Héctor Reyes

Foto:  Erick Estrella

La doble medallista olímpica de taekwondo, María Espinoza, encargada de hablar a nombre de la delegación olímpica que asistirá a los Juegos de Río de Janeiro, durante la ceremonia de abanderamiento celebrada en la residencia oficial de los Pinos, afirmó que ella forma parte del proceso de cambio que vive el deporte mexicano.

“Yo me siento contenta de esta delegación que va a Juegos Olímpicos y me siento honrada de ir representando a mí país”, expuso la deportista que se sentó a la derecha del presidente Enrique Peña Nieto y coincidió en los conceptos vertidos por el mandatario mexicano. María es una histórica del deporte olímpico y representa a las Fuerzas Armadas, con un aporte de 21 integrantes  en el equipo nacional.

La delegación olímpica quedó integrada por 126 exponentes, con las bajas de los atletas Juan Luis Barrios y el velocista César Ramírez, de los cuales cerca de 40, se ubican dentro de los primeros 16 del mundo. En el caso de María del Rosario finalizó como número uno del mundo: “Eso habla bien de nosotros como deportistas, a nosotros como delegación, esperemos que las cosas salgan bien, a la hora de ya estar compitiendo y que haya muchas alegrías para México”.

Con una experiencia de dos Juegos Olímpicos, consideró que para muchos son sus primeros Juegos Olímpicos, le gusta conocer a deportistas de diferentes disciplinas, llevarse bien y sacar lo mejor de ellos en su calidad de líder. La voz de la experiencia y ejemplo para sus compañeros que asistieron a su primer abanderamiento: Itzel Manjarrez, Saúl Gutiérrez y Carlos Navarro, así como también de otros atletas que la admiran como la marchista Guadalupe González, a la que consideró un ejemplo a seguir.