La racquetbolista Paola Longoria vive los Juegos Olímpicos de Río 2016 como espectadora. Su deporte no está considerado en estos encuentros, pero los vive y disfruta imaginando lo que sus demás compañeros sienten y se une a la fiesta., al estar de comentarista para un medio informativo.
“Es otra faceta diferente, otra perspectiva pero sin salirme de lo que implica la palabra deporte. Orgullosa de estar en los Juegos Olímpicos, la fiesta más grande de cada cuatro años, donde están las demás disciplinas”.
Abanderada en Juegos Centroamericano y Panamericanos, no puede completar el ciclo como ella quisiera.
“Privilegiada porque además estará en la inauguración. Honestamente es una faceta de la que deseas parte pero compitiendo. Siempre he dicho que ojalá el racquetbol fuera disciplina olímpica, porque el ambiente lo haces tuyo cuando ves a los demás compañeros celebrar que están aquí”.
Ya con más gente alrededor del Parque Olímpico, para Longoria le ilusiona encontrarse a quienes ha visto durante su carrera.
“Te los vas encontrando en el camino y te llena de alegría el saber que están cumpliendo su meta. Es una lucha constante de bajas y subidas, pero asís es el deporte”.
Dijo Paola que cada acontecimiento es una experiencia de la que también aprende.
“Estaré con todo con los deportistas. Vamos a demostrar que el ya merito ha desaparecido de la mentalidad y eso es una gran ventaja porque se puede hacer un buen papel”.
Por otro lado, dijo que se siente mal por lo que le pasó a la esgrimista Paola Pliego.
“No sé qué pasó pero cada atleta sabe lo que debe o no tomar. Es mi amiga y sé que algo le hicieron porque ella tenía muchas ilusiones de estar en los Juegos. Me duele como deportista y ojalá que sí pueda venir a disfrutar de este encuentro”.