El equipo británico de ciclismo se adjudicó la medalla de oro en la final de la prueba de persecución por equipos varonil de los Juegos Olímpicos Río 2016, además de imponer récord mundial.

Con una velocidad de 62.536 kilómetros por hora, el cuadro británico prácticamente voló en la pista para imponer esa marca y colgarse el metal dorado con un tiempo de 3:50.265 minutos.

La plata correspondió al equipo australiano (3:51.008 y la presea de bronce se la llevó el equipo danés, con un tiempo de 3:53.789.

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Los pedalistas australianos Alexander Edmonson, Jack Borridge, Michael Hepburn y Sam Welsford poco pudieron hacer para parar a la máquina de velocidad británica con su tiempo de 3:51.008 y se quedaron con el metal plateado.

Mientras la presea bronceada correspondió al equipo danés conformado por Norman Hansen, Niklas Larsen, Frederik Madsen y Casper Von Folsach, con un tiempo de 3:53.789 minutos.

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En una jornada en la que se dieron varias sorpresas en esta disciplina, el conjunto británico no podía cerrar sin dar la suya en la final y concluyó con su marca del orbe al cerrar de buena manera esta prueba.