JAVIER Orozco se fue en blanco en su regreso a la Selección Mexicana. El “Chuletita” buscó anotar en los duelos contra Chile y Bolivia, pero la falta de contundencia y hasta la falta de concentración terminaron por afectarlo, por lo que se fue con un sabor amargo.
Sin embargo, también se muestra tranquilo, ya que siempre fue al frente, corrió, luchó, brincó y metió duro la pierna en pos de festejar, pero la pelota no quiso entrar como en aquella ocasión frente al portero chileno, Claudio Bravo.
“Venía por goles, lamentablemente no los pude concretar, por ahí si estás un poco distraído porque quieres hacer todo, pero en mí no quedó, siempre lo busqué”, afirmó un luchador Orozco, quien se compromete a no bajar los brazos.
“Regresaré a mi club, a brindarme, a anotar, a brillar para nuevamente ser visto por el técnico y ser contemplado para otra ocasión, me comprometo a que así será”, reafirmó el jugador.
El hecho de no anotar no se debió al poco entendimiento con la idea futbolística de Miguel Herrera o el acoplamiento con Oribe Peralta o Érick Torres. “Un atacante anota de todas las formas y en todos los planteamientos, no hay pretexto, el gol no se me dio, conozco el estilo de Miguel y a lo mejor nunca había jugado con el Cubo’, pero esto es futbol, y te entiendes en minutos”, agregó. (LGO)