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12, septiembre 2014 - 12:17

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POR ABIGAIL PARRA
FOTOS: Fototeca, Hemeroteca y Biblioteca ”Mario Vázquez Raña”
Primera de dos partes

SEIS décadas de historia en el futbol mexicano no son nada fáciles de contar. Sesenta años desde la creación de uno de los más grandes clubes en el balompié mexicano. Pumas no es sólo un equipo de futbol, es una institución que representa a la máxima casa de estudios del país, la Universidad Nacional Autónoma de México. Con los colores azul y oro y uno de los felinos de mayor belleza y fuerza en su escudo.

El club de futbol Universidad nació en 1954, pero la idea de tener un equipo universitario surgió antes, en la década de los treinta, cuando en la misma UNAM se llevaban a cabo torneos entre escuelas, como las de ingeniería, medicina, arquitectura y leyes.

NACE EL EQUIPO
Durante la rectoría de Nabor Carrillo Flores en la UNAM, la idea de poseer un plantel en la Liga Mayor mexicana tomó más fuerza y el sueño se logró con el interés de los estudiantes y el apoyo en el tema económico del entonces director de Obras Públicas del Departamento del Distrito Federal, Guillermo Aguilar Álvarez.

La identidad del nuevo equipo estaba apegada a todo el significado de la apenas floreciente Ciudad Universitaria. Los colores y el escudo fueron adoptados del equipo de futbol americano Pumas. Ambas insignias fueron creadas una década antes por el legendario entrenador de futbol americano Roberto “Tapatío” Méndez.

LLEGÓ EL DÍA
El esfuerzo tuvo resultado, y un 12 de septiembre de 1954, el Club Universidad jugó su primer duelo oficial ante Monterrey en la Sultana del Norte, en donde cayó con un marcador de 3-1.
A partir de ese momento y con esa oportunidad, en Pumas se comenzó a forjar la idea de obtener jugadores provenientes de la creciente cantidad de jóvenes y apasionados estudiantes.

CANTERA
Las dificultades para el conjunto felino no se hicieron esperar en el tema futbolístico en la Primera División, pero por otro lado, el proyecto naciente tenía en la mira un lugar para establecerse, en que se depositarían los mejores sueños para la formación de futuros futbolistas de Universidad: Cantera.

Producto de la enorme explosión del volcán Xitle hace miles de años, aproximadamente en el 700 a.C., el terreno en el que hoy se encuentra Cantera Pumas es uno de los proyectos arquitectónicos del balompié nacional más impresionantes en el tema de instalaciones deportivas.

En 1995, el reto de construir para el Club Pumas vio sus primeros intereses, pues tras una extracción de más de cinco millones de metros cúbicos de piedra, el terreno había descendido su nivel 35 metros.

LOS CULPABLES
La idea ya estaba en la mesa, la planeación arquitectónica corrió a cargo del arquitecto Juan José Díaz Infante y de Jorge Gaitán Martínez, en conjunto con su grupo de trabajo y con el apoyo económico de la UNAM y empresas privadas, así como de los ingenieros Gilberto Borja Navarrete, Guillermo Aguilar Álvarez y Raúl Borja Navarrete. El primer paso fue contemplar una entrada independiente de la fábrica de asfalto (que actualmente se encuentra a un lado de Cantera), para que el 23 de junio de 1995 dieran paso a la primera máquina que comenzó con la preparación del terreno para los primeros estudios topográficos. Los años pasaron y la construcción se inauguró el 29 de octubre de 1997.

“CACHORROS”
Todo listo para que las nuevas promesas iniciaran su formación básica con una visión que se basó en la mística del conjunto auriazul y que durante años ha sido una fábrica de grandes jugadores que han logrado marcar la historia del futbol mexicano. Uno de los nombres más representativos de las fuerzas básicas de Pumas es el delantero pentapichichi Hugo Sánchez, considerado como el mejor futbolista del Siglo XX en CONCACAF.

“Hugol” fue uno de los primeros universitarios en abrir la exportación del futbolista mexicano al extranjero, el delantero surgido de la Cantera de Pumas jugó en España con el Atlético de Madrid (1981-1985) y con el Real Madrid, (1985-1992), en donde obtuvo su máxima gloria.

Otro felinos como Manuel Negrete, Leonardo Cuéllar, Luis Flores, Luis García, Jorge Campos, Alberto García Aspe y Claudio Suárez lograron traspasar fronteras con su técnica y temple en el futbol.

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