CURITIBA, Brasil (AP).- Las esperanzas españolas de retener la Copa del Mundo conquistada hace cuatro años se fortalecerán aún más si Sergio Ramos puede hacer por su selección lo que hizo por el Real Madrid en esta temporada.

Ramos atraviesa por la mejor campaña de su carrera, y para muestra quedó el cabezazo en los descuentos, que obligó a la prórroga en la final de la Liga de Campeones de Europa, donde el conjunto “merengue” terminó coronándose al imponerse 4-1 al Atlético de Madrid.

“Ése fue uno de los mejores momentos que conseguí a lo largo de mi vida”, dijo Ramos este martes, en las instalaciones del Atlético Paranaense, donde España entrena. “Poder colaborar con ese gol que nos daba la prórroga ante un equipo que luchaba por un sueño como la Champions te demuestra que cuando estás convencido y sigues luchando hasta el final hay posibilidad de vencer”.

Ramos, de 28 años, llega luego de anotar seis goles en siete partidos con su club, que ganó también la Copa del Rey en esta campaña, frente al Barcelona, el odiado rival.

El viernes, Ramos cumplirá su aparición 117 con España, para abrir las hostilidades en el Grupo B, frente a Holanda, en una revancha de la final que conquistó España en 2010, por 1-0 en el alargue.

“Afortunadamente puedo decir que he ganado muchos títulos, pero no puedes vivir del pasado, hay que demostrar día a día”, consideró “En el fútbol tienes que vivir el presente y mi reto personal es superarme día a día”.

En este Mundial, Ramos no sólo tiene fantasías sobre llevar al campeón defensor hacia un cuarto título de renombre (tras dos Eurocopas y un Mundial). También busca reivindicación y la oportunidad de vencer a los anfitriones. Brasil aplastó 3-0 a España en la final de la Copa Confederaciones el año pasado.

“Lo bonito del futbol es que siempre te ofrece revancha”, comentó. “Llegar aquí es un ‘plus’ de motivación, estar entre los mejores. A día de hoy, España es la actual campeona del mundo y nos toca defender esa copa”.

Sin embargo, Ramos trata de no adelantarse, ante el hecho de que el grupo de España luce como uno de los más competidos del Mundial, con Holanda, Chile y Australia. Ramos ha sido el bastión de una defensiva que no ha aceptado un gol en la eliminatoria de las últimas dos Euros y de un Mundial, una racha de 10 partidos desde 2008.

“Debemos centrarnos en nuestra filosofía de juego, la que nos ha llevado al éxito. No tenemos que cambiarla y mantener siempre máximo respeto al rival, que fue lo que nos llevó a lo más alto”, manifestó.