La tenista italiana Roberta Vinci, séptima cabeza de serie, mantiene la magia ganadora en el Abierto de Estados Unidos al conseguir por segundo año consecutivo el pase a los cuartos de final tras vencer 7-6 (5) y 6-2 a la ucraniana Lesia Tsurenko.

Vinci, de 33 años, que en 2015 dio la gran sorpresa al eliminar en semifinales a la gran favorita del torneo la estadounidense Serena Williams, volvió a ser la jugadora luchadora que a pesar de tener problemas físicos nunca bajó los brazos y al final alcanzó la victoria después de una hora y 38 minutos.

La tenista, que el año pasado perdió la final ante su compatriota Flavia Penetta, quien se retiró nada más concluir el torneo, salió a la pista Louis Armstrong Stadium con la pierna izquierda vendada y en determinados momentos del partido mostró dificultad para correr.

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Pero tampoco estuvo sobrada de fuerzas Tsurenko, de 26 años, que también salió con la pierna derecha vendada, lo que hizo que en los momentos decisivos de la primera manga no respondiese con agresividad cuando se jugaron los tantos decisivos.

Luego en la segunda ya fue todo mucho más fácil para Vinci que tendrá como rival en cuartos a la ganadora del duelo que esta noche protagonizan la alemana Angelique Kerber, segunda cabeza de serie, y la checa Petra Kvitova, decimocuarta favorita.

La latvia Anastasija Sevastova también se mantuvo como la verdugo de las cabezas de serie al ganar por 6-4 y 7-5 a la británica Johanna Konta, decimotercera favorita, y conseguir la clasificación a sus primeros cuartos de final en un torneo de Grand Slam.

Sevastova, de 26 años, 48 del mundo que también fue la verdugo de la hispano-venezolana Garbiñe Muguruza, tercera favorita, en la segunda ronda, tendrá como rival a la danesa Caroline Wozniacki que se impuso por 6-3 y 6-4 a la estadounidense Madison Keys, octava preclasificada.

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