POR HÉCTOR REYES

La revelación del atletismo mexicano, el lanzador de martillo Diego del Real, habla de planes con miras a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, con una proyección de convertirse en un exponente de más de 80 metros.

“Definitivamente sí, es un proceso de tiempo para poner un año específico como meta, sería tanto limitarnos, como apresurarnos, que el trabajo nos vaya dando  la pauta para ver que tanto nos tardamos. El año pasado de 72 metros salté a 77, es un salto increíble, pienso que hay que ser muy cuidadosos y no adelantar procesos y siempre pensando llegar a mi mejor forma a Tokio 2020”.

Solo tiene tres semanas de descanso y las utilizará para sentar las directrices de los próximos cuatro años: “hay que ser muy inteligentes que se va a elegir, dónde se va a entrenar, dónde se va a competir y todo lo que conlleva el equipo multidisciplinario”.

Al ser finalista olímpico tendrá oportunidad de tener competencias internacionales que le permitan un roce que no había tenido.

“El próximo año es transitorio dentro del ciclo olímpico, queremos el campeonato del mundo, tanto universitario como el de la especialidad, uno es en China y otro en la Gran Bretaña ¿y para Diego del Real qué le espera? Nada, más seguir trabajando y como le he dicho siempre un excelente actuación y lo que tenga que venir”.

Gran parte del éxito de muchos países ha sido la coordinación, luego del sorprendente desarrollo de la Gran Bretaña.

“De esa manera se puede dar una sinergia muy positiva, en el cual el atleta se sienta apoyado, se sienta seguro y que se dedique a hacer lo suyo, que es dar resultados”, situación que no es muy clara en México, con una Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo demandada por la CONADE.

El Campeonato del Mundo de Londres, Inglaterra, es el compromiso más importante del año próximo y ya compitió en contra de los mejores, acarició la medallas de  bronce se le arrebató el oponente en el último lanzamiento y “demostramos que hay casta en México, entonces hay que seguir trabajando, mejorar nuestro nivel de estabilización, recordemos que no es lo que hagas, tú mejor marca, sino la estabilidad que te va a dar la certeza”.

Sobre los cambios físicos y técnicos, se evaluarán con el equipo multidisciplinario para consolidarse, ya entró a un nivel elite y ahora lo importante es mantenerse, ya tuvo la iniciación y desarrollo y ahora viene la maestría deportiva que es después de los 10 años.

A Diego del Real le gustaría recibir el Premio Nacional de Deportes como alguien consolidado, a pesar de su excelente actuación, pero “sabría mejor con una medalla en la mano”.