El gigante estadounidense de los medios de comunicación, Liberty Media, ha dado a conocer su primer paso hacia la toma del control de la Fórmula Uno, que costará 8 mil millones de dólares totales.

Liberty Media tomará una participación del 18.7 por ciento en la F1 en el corto plazo. El paso inicial es un contrato de 1.1 millones de dólares, con Chase Carey -el vicepresidente ejecutivo de 21st Century Fox- para ser instalado como nuevo presidente de la F1.

“Estoy muy contento de asumir el papel de presidente de la Fórmula Uno y tener la oportunidad de trabajar junto a Bernie Ecclestone, CVC, y el equipo Liberty Media”, dijo Carey.

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“Admiro mucho la Fórmula Uno como una única licencia de deportes de entretenimiento global atrayendo a cientos de millones de fans en cada temporada de todo el mundo. Veo una gran oportunidad para ayudar a la Fórmula Uno a continuar desarrollándose y prosperando en beneficio de los deportes, los fans, equipos e inversores por igual”.

Chase Carey sucede a Peter Brabeck-Letmathe, quien permanecerá de la Fórmula Uno como director no ejecutivo.

Bernie Ecclestone, titular de los derechos comerciales, conservará su posición de CEO como se informó anteriormente.

Bernie dijo: “Me gustaría dar la bienvenida a Liberty Media y Chase Carey a la Fórmula Uno y espero con interés trabajar con ellos”.

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Liberty invertirá 4.4 mil millones en total, también asumirá 4.1 mil millones de la deuda de la F1. El total del trato que está programado para cerrarse en el primer trimestre del 2017, con un valor de 8 mil millones.

CVC Capital Partners, los propietarios actuales de la F1, retendrá el 65 por ciento de la renombrado ‘ Grupo Fórmula 1’, pero no controlarán los derechos de voto.

Liberty Global es propiedad de John Malone, quien posee una cartera variada de empresas de radio satelital Sirius XM para el equipo de beisbol de los Bravos de Atlanta.